El grupo Torras Hostench aumenta su participación en ERT al 24,9% para forzar la salida de EscondrilIas

El grupo Torras Hostench, que actualmente ostenta el control del 15% del capital social en ERT, incrementará su participación en otro 10%, hasta llegar al 24,9%, para forzar la salida de José María Escondrillas de la presidencia de la compañía. La papelera catalana, que inició en la semana pasada en bolsa su nueva escalada accionarial en ERT, puede tener completado ya en estos momentos dicho 10% adicional.

La operación en cuento a coste se refiere, se ha visto beneficiada por la caída de la cotización de las acciones de ERT, caída producida en gran medida por el atrincheramiento de Escondrillas en la presidencia y el temor que ello ha provocado en algunos inversores extranjeros, básicamente británicos, que han venido soltando paquetes en los últimos días.Con el nuevo aporte accionarial, la papelera catalana tendrá el camino desbrozado para el planteamiento de una junta general extraordinaria de la que debe salir un nuevo consejo de ERT. A su casi 25% habrá que añadir la delegación de voto de otro 32% de acciones en manos de fondos de inversión extranjeros, como el Fidelity o el banco británico Warburg Mercury, lo que hace un porcentaje unificado del 57 por ciento. De acuerdo con fuentes oficiales, la administración parece tener claro que Torras cuenta con los apoyos de varios fondos extranjeros. Algunas de esas pruebas, como la procedente del Warburg Mercyry Investment Management, son de esta misma semana, en forma de télex dirigidos a la firma catalana. Siempre según las citadas fuentes oficiales, Escondrillas ha podido examinar los mencionados télex en su propio despacho de ERT, aunque luego haya manifestado la inexistencia de pruebas de los derechos de control que reclama Torras.

Sobre un capital nominal de 17.961 millones de pesetas, representado por 35.922.000 acciones, Torras ya hace semanas hizo llegar certificaciones bancarias al consejo de ERRT de poseer 5,4 millones de acciones. Los apoyos recibidos de los mencionados inversores institucionales extranjeros suman otros 7,8 millones de acciones. Si se tiene en cuenta que el capital de ERT es en realidad de 16.600 millones, al descontar 1.300 millones procedentes de créditos participativos que deben desaparecer en el acuerdo final con las banca acreedora, aquellos dos porcentajes suman ya casi el 40% del capital de la sociedad. Las nuevas adquisiciones accionariales efectuadas por Torras, hasta llegar a ese 24,9% al que tan aficionados son los inversores del Kio, dará al grupo catalán, cuando tenga en su poder las delegaciones de voto jurídicamente documentadas, una cómoda mayoría para imponer sus criterios en la cúpula gerencial de ERT.

No del Crédit Commercial

Por otra parte, el banco francés Crédit Commercial de France (CCF) confirmó ayer su posición contraria al plan Escondrillas diseñado para terminar con los flecos de la crisis financiera de ERT, iniciada en el otoño de 1982. El CCF remitió al filo de las 24 horas del pasado miércoles, 30 de septiembre, un télex a la gerencia de ERT con su no al citado plan.