Los hermanos Sánchez Vicario se enfrentarán en Madrid por primera vez en una final del Grand Prix
Los hermanos Sánchez Vicario, Emilio y Javier, se enfrentarán hoy (12-30, TVE,2) en la final del torneo de tenis de Madrid, que se disputa en el Club de Campo. Ésta será la primera vez que los hermanos Sánchez Vicario se enfrenten en una final del Grand Prix. Javier venció ayer en semifinales a Jorgen Windhal (Suecia) por 6-3 y 6-4, mientras que Emilio ganó a Franco Davín (Argentina) por 7-5 y 6-1. Gene y Sandy Mayer, de Estados Unidos, jugaron la última final de un torneo del circuito del Grand Prix entre hermanos en el Open de Estocolmo de 1981.
Javier y Emilio, además, se enfrentarán en la final de dobles, que se jugará después de la individual. Emilio forma pareja con Sergio Casal y Javier con el peruano Di Laura.El dominio de la familia Sánchez Vicario en el tenis español está alcanzando una situación cercana al monopolio. Si Arantxa es la mejor jugadora a los 15 años y Emilio, de 22 años, el número uno masculino, Javier, de 19 años, está realizando una progresión constante que en breve puede situarle a la altura de su hermano mayor. Mejor jugador júnior mundial en 1986, 95º en la clasificación de la Asociación de Tenistas Profesionales (ATP), Javier logró ayer entrar en una final del Grand Prix por vez primera.
Javier fue el primero en conseguir clasificarse para el duelo fratricida. Venció al sueco Windhal, 120º del mundo, en una hora y 40 minutos. La primera manga la ganó con facilidad, pero en la segunda perdió la concentración tras alcanzar una ventaja de 3-0, y Windhal se situó con un 3-4 favorable. Tres nuevos juegos consecutivos le dieron a Javier su clasificación para la final.
Emilio, 16º en la clasificación mundial, venció al argentino Franco Davín, 124º de la ATP, en una hora y 23 minutos. Sin embargo, el español tuvo un primer set muy complicado. Davín, de 17 años, es un zurdo con muchas cualidades, considerado como uno de los mejores júniors del mundo. El encuentro estuvo igualado hasta el 6-5 favorable a Emilio. Davín, con su saque y ventaja en el marcador, colocó un drive durísimo en la esquina derecha de la pista al que el español no llegó. Mientras Davín festejaba su llegada a la muerte súbita, el juez de línea señaló como mala esa bola. A partir de ese momento, Davín, obsesionado por el error del juez, perdió totalmente su sitio en la pista y entregó el primer set por 7-5 y la segunda manga por 6-1.
"Jugar contra el hermano mayor es muy complicado", dijo ayer Javier. "Estoy contento por llegar por primera vez a una final, y espero que no sea la última. Pero todavía debo madurar como jugador para vencer a Emilio".
Dominio de Emilio
Este año, los hermanos Sánchez Vicario ya se han enfrentado en dos ocasiones en torneos del Grand Prix. Emilio ganó en Hamburgo por 6-2 y 75, y en Roma por 6-2 y 6-4. En ambas ocasiones perdió en la ronda sieuiente ante el sueco Kent Carlsson. Ni entonces ni en torneos de exhibición jugados en España Javier logró ganar un set a Emilio. El hermano mayor también se preocupó ayer de dejar las cosas claras: "Javier será un rival muy difícil en el futuro, pero todavía no debe ganarme". Tras su buen torneo, Javier tiene ahora posibilidades de ser el número dos de España ante Suecia en la semifinal de la Copa Davis, aunque el capitán Manuel Orantes parece inclinarse por la mayor experiencia de Sergio Casal.
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