Dirigentes de Coalición Galega dan por hecho que se lograra un pacto de gobierno con los socialistas

El Comité Ejecutivo de Coalición Galega (CG) decidió en la madrugada de ayer facultar a la comisión negociadora del partido para suscribir cualquier tipo de acuerdo en las conversaciones que mantiene con el PSOE y el Partido Nacionalista Galego, (PNG) sobre la moción de censura contra el Gobierno de Fernández Albor, que comenzará a debatirse el lunes. Aunque CG -de la que depende que la moción prospere- no ha anunciado su postura oficial, varios dirigentes de esta fuerza política dieron ayer por hecho el acuerdo con el PSOE y el PNG, que sería la "salida más lógica" a la situación actual, en palabras del portavoz de la comisión negociadora de CG, Cándido Sánchez Castiñeiras.

Según fuentes próximas a la negociación tripartita, la firma del pacto es inminente.Al igual que CG, los socialistas y el PNG han reconocido importantes avances en la negociación y aseguran que no existen diferencias insalvables. La única dificultad que podría frustrar el acuerdo es, según fuentes próximas a la negociación, la conveniencia de ceder una única vicepresidencia en el hipotético Gobierno a José Luis Barreiro, que ya ocupara este mismo cargo en el anterior Gobierno de Albor.

En algunos sectores del PSOE esta posibilidad despierta numerosos recelos, ya que se considera que Barreiro podría protagonizar contra González Laxe un golpe de mano similar al hecho contra Fernández Albor y, además, la opinión pública no aceptaría tal concesión.

CG insiste en reservarse una única vicepresidencia para sí, mientras que los socialistas preferirían que hubiese dos vicepresidentes, uno de ellos perteneciente a su propio partido. También el secretario general del PNG, Pablo González Mariñas, aspira a una de esas vicepresidencias, aunque se conformaría con obtener la consellería de la Presidencia.

Coalición Galega decidió igualmente no celebrar ninguna conversación con Coalición Popular, pese a las insistentes peticiones de los hombres de Fernández Albor y al deseo manifestado públicamente por el vicepresidente de la Xunta, Mariano Rajoy.

Los dirigentes del partido, mientras tanto, afirman que todavía no han finalizado las negociaciones, pero dan prácticamente por hecho el acuerdo, que, de concretarse, convertiría el próximo miércoles al socialista Fernando González Laxe en el nuevo presidente de la Xunta. Sánchez Castiñeiras afirmó que el Gobierno tripartito es la "salida más lógica" y advirtió incluso sobre la inquietud que pueda sembrar esta solución de gobierno diciendo: "La que gana es Galicia".

El ex vicepresidente de la Xunta y uno de los tres miembros de la comisión negociadora de CG, José Luis Barreiro, dio por realizado un Gobierno de centro izquierda, que a su juicio "trastocaría todos los procesos históricos y sociales habidos hasta ahora en Galicia" y supondría la "culminación" de otro proceso iniciado el 30 de octubre del pasado año, cuando el propio Barreiro y otros cuatro conselleiros presentaron su dimisión a Fernández Albor. El mismo presidente de Coalición Galega, Fernando García Agudín -considerado contrario a la tesis del pacto con los socialistas-, defendió la oportunidad de alcanzar un acuerdo que permita la sustitución del actual Gobierno.

"Obligados por AP"

El secretario general de los socialistas gallegos, Antolín Sánchez Presedo, reconoció ayer que se ha llegado a un acuerdo programático y que lo que ahora se discute es la distribución de carteras entre los tres partidos en un hipotético gobierno.Por su parte, el vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, afirmó ayer en Jávea (Alicante), que Alianza Popular "ha obligado a los socialistas a que presenten la moción de censura contra el Gobierno de Fernández Albor", según informa Anabel Díez. Según Guerra, Fernández Albor ya ha sufrido una "censura política", por parte de sus propios compañeros al haber anunciado que Manuel Fraga será el próximo candidato de AP a la presidencia de la Xunta.

El vicepresidente del Gobierno considera que con la iniciativa de los socialistas se está haciendo "pirotecnia" y explicó que se han decidido a presentar esta moción habida cuenta de que el tiempo transcurría y que el desgobierno en esa comunidad autónoma continuaba.

El vicepresidente aseguró desconocer el curso de las negociaciones entre los socialistas gallegos y las otras fuerzas políticas con las que pretende contar para formar un Gobierno de progreso al recordar que el PSOE "funciona de una forma descentralizada".

[De su lado, el vicepresidente de AP, Alberto Ruiz Gallardón, declaró ayer en la apertura del VII Congreso Nacional de Nuevas Generaciones que el PSOE "está dejando de ser un partido democrático" porque intenta "hurtar la voluntad del pueblo gallego" informa Efe. En declaraciones posteriores a los periodistas, Ruiz Gallardón expresó su confianza en que "dentro de la guerra civil del PSOE" impere el "buen sentido" de personas como Carmen García Bloise y Juan Barranco, -quienes han hecho recientemente declaraciones oponiéndose a la moción de censura, "frente al sector capitaneado por Alfonso Guerra".]