El cantante catalán Pau Riba, en 'A media voz'

Pau Riba siempre ha caminado a su aire por el mundo de la música. Sus primeros pasos fueron en el Grup de FoIk, reunión de cantantes catalanes que a finales de la década de los sesenta iniciaron en España el movimiento que introdujo el fólclor en su concepto más abierto y universal.El rock se convirtió en la siguiente apuesta de Pau Riba, aunque su constante desmarque de lo trillado le ha mantenido siempre en un nivel de aceptación minoritaria fuera de Cataluña. Su trayectoria musical, caracterizada por fugaces apariciones y silenciosos alejamientos, le ha llevado a buscar colaboraciones con grupos de rock, guitarristas de inspiración flamenca como Toti Soler y mentalidades alucinantes como David Allen, del desaparecido grupo Gong.

Autor de discos originales y polémicos -Licors- y canciones magníficas -Noia de porcelana o Taxista-, recientemente ha editado Transnarcis, un doble elepé dirigido a los cinco sentidos y que se acompaña con siete perfumes y un elixir. Coincidiendo con su publicación, Pau Riba reaparece sobre los escenarios para comprobar si todavía es posible la heterodoxia y, de paso, enfrentarse a pasadas y aplastantes declaraciones de principios: "Prefiero andar sobre un asfalto de fracasos que sobre una frágil lámina de triunfos".