La oferta presiona en casi todos los corros

Las realizaciones de beneficios, contenidas la víspera en espera de precios mejores, han dejado sentir su influjo a lo largo y ancho de la sesión de ayer en la práctica totalidad de los grupos de contratación. Los valores de menor dimensión han sido los más beneficiados por el trasvase de recursos que se ha generado desde los corros industriales, sin que esta dinámica haya entorpecido de manera ostensible el buen grado de absorción del papel demostrado a diario por el mercado. En este sentido, junto a unos bancos irregulares, pero con aparente buen fondo, y unas eléctricas que aguantan el tipo con bastante soltura, aparece una Telefónica en baja, pese a las noticias de ampliación, y unos "hierros" que adquieren todo el protagonismo que les otorga la inversión más rabiosamente activa.La posible incidencia de la augurada resistencia a la baja de los tipos de interés ha sido calibrada de diferente manera, puesto que mientras a la inversión nacional le supone la existencia de competidores a la hora de canalizar los recursos, para los bolsistas foráneos significa un efecto balsámico al favorecerse de los diferenciales en el tipo de cambio.

En general, la mañana bursátil ha estado marcada por cierta sensación, advertida desde diversas instancias, de que los inversores institucionales podrían haber intentado formar en alguna medida una flexión en las cotizaciones, con el doble objetivo de materializar plusvalías y conseguir precios mas atractivos para colocar los excedentes de liquidez con que parecen contar. Por tanto, y a falta de un criterio valorativo concreto, el pronóstico para los próximos días incluye grandes dosis de irregularidad, al tiempo que cuenta con el total desdibujamiento de las grandes líneas del mercado. El corto plazo debe imponerse en esta semana, que se presenta bastante más compleja de lo que se había previsto.