Precios

Suponiendo que sea cierto que en mayo pasado en algunos mercados el precio de un par de cosas comestibles bajó un cero, cero, cero, uno por ciento, que tanto se comenta en la calle, tiendas y comercios en sentido inverso, tendríamos que echar las campanas al vuelo porque desde aquel remoto funesto verano de tan triste historia empezó la escalada de precios hacia el cielo provocando en el suelo ibérico un infierno de desastre económico.Pongamos un ejemplo breve en forma de pregunta relacionado con lo que precede: ¿en qué nivel se encuentran los precios de ropa, calzado, vivienda ... ? Es evidente que se han encarecido en poco tiempo en un 1.000 por 1.

Y ya que estamos en cifras, ¿qué dirá esa masa de jóvenes y no tan jóvenes parados forzosos y tantos viejos jubilados con pensiones limosneras o sin ninguna cuando saben y se enteran de la serie de miles de millones malgastados en cosas estériles cuando no destructivas que por prudencia y evitación de escándalo omito?-