Núñez ofrece a Schuster volver a jugar en el Barcelona

Bernd Schuster cumplirá el año de contrato que le queda con el FC Barcelona y, además, podría volver a jugar en el primer equipo la próxima temporada, según se desprende de las manifestaciones que el propio jugador alemán y el presidente azulgrana, Josep Lluís Núñez, realizaron ayer al mediodía después de mantener a reunión que se prolongó por espacio de más de dos horas en las oficinas del club. Núñez quiere que el jugador renueve su contrato por tres temporadas antes de que comience la Liga 1987-1988 o, en caso contrario, está dispuesto a acceder al trapaso. El jugador, por su parte, pide volver inmediatamente al equipo y poder recuperar la confianza en el club para porrogar su contrato.

El vicepresidente primero del Barcelona, Joan Gaspart, consiguió finalmente reunir ayer en una misma mesa a Núñez y a Schuster, que estuvo acompañado por sus abogados Gonzalo Ivars y Jacint Soler Padró y por su esposa Gaby, para intentar pactar una salida al conflicto que ha enfrentado al presidente y al jugador azulgrana desde la final de la Copa de Europa, el 7 de mayo de 1986.La solución alcanzada pasa por el regreso inmediato del centrocampista al primer equipo en el año que le queda de contrato. A ambas partes no les quedaba otra alternativa. Núñez pretende recuperar su imagen y la del equipo ofreciendo a los socios la reintegración de Schuster. Mientras, el jugador, ante la imposibilidad de una cesión o un trapaso sin condiciones, sólo puede aspirar a jugar el próximo año en el club azulgrana.

Soler Padró, abogado de Schuster, no se recató en afirmar durante la conferencia de prensa que siguió a la entrevista que "hoy [por ayer] hemos comenzado a dialogar, para cerrar el pasado y abrir una nueva etapa. En la reunión se han planteado diferentes alternativas cómo la renovación del contrato; una posible cesión, que el club se niega a reconocer como un derecho del jugador, o el regreso de Schuster al equipo la próxima temporada". Soler Padró admitió un cambio de actitud por parte del jugador que, en los últimos meses, había reiterado su negativa a reincorporarse a la plantilla mientras Nuñez continuara en la presidencia de la entidad.

Núñez puntualizó que el Barcelona ofrecía a Shuster dos alternativas. Una es la renovación por tres temporadas de su contrato, que acaba el 30 de junio de 1988, por un importe global de 240 millones de pesetas. "Sería poco coherente", argumentó el presidente, "que si en el acto previo de conciliación al juicio le ofrecimos la prórroga de su contrato, ahora se la negáramos". "El Barcelona cree que la única forma de que Schuster se integre totalmente en el club es asegurando su continuidad". La segunda posibilidad que la entidad ofrece al jugador es el traspaso. "Si se quiere ir", manifestó Núñez, "le daremos las mismas facilidades que nos dan a nosotros cuando queremos contratar a un jugador.

La conferencia de prensa se convirtió en un pique entre Núñez y Soler Padrá, con alguna intervención de Gaspart, hasta que se formuló la primera pregunta a Bernd Schuster. ¿Está dispuesto a continuar en el Barcelona? "Por eso estamos aquí", respondió el jugador, "el problema era dejar las cosas pasadas atrás y ver qué es lo que puede ocurrir la próxima temporada. Me gustaría terminar este próximo año jugando en el Barcelona, comprobando hasta qué punto se puede volver a coger la confianza necesaria para seguir y, si las cosas van bien, luego no tendría inconveniente en volver a hablar sobre mi futuro. Por lo tanto no voy a pensar lo que voy a hacer; sólo tengo, decidido que intentaré seguir un año más".

La propuesta de Schuster no convence a Núñez porque el presidente teme que el jugador vuelva al equipo esta temporada y luego, el 30 de junio de 1988, cuando quede en libertad por la finalización de su contrato con el Barcelona, decida irse a otro club. "Por eso digo que si no hay sinceridad no habrá solución", argumentó. "Yo no puedo decirle a la afición que Schuster vuelve para jugar a medias.