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LAS ELECCIONES DEL 10 DE JUNIO

Suárez afirma que su partido será oposición donde no obtenga mayoría para gobernar en solitario

Álex Grijelmo

Adolfo Suárez, presidente del CDS, cerró anoche ante sus paisanos de Avila el periplo electoral del partido centrista que tendrá su colofón esta noche en el Teatro Monumental de Madrid. En la capital abulense, Suárez fue recibido con lluvia chispeante y unas 1.200 personas, que dejaron mediada la plaza del Mercado Chico y le escucharon su tesis de que su partido está deseando desempeñar una oposición rigurosa donde no obtenga mayoría suficiente para gobernar en solitario.

La lluvia amenazante primero y suavemente presente después deslució el previsto baño de masas abulense hasta el punto de que se quedó en un mero chapuzón frente al mitin que el CDS había vivido horas antes en Valladolid. Suárez había llenado por la mañana el pabellón de deportes Huerta del Rey en Valladolid, el mismo recinto que también había abarrotado antes Alfonso Guerra, vicepresidente del Gobierno. Las 2.500 personas presentes se mostraron enfervorizadas ante el discurso del dirigente centrista. Suárez recibió en Valladolid un verdadero baño de multitudes, sobre todo en su penoso intento de recorrer los 50- metros que separaban el polideportivo del autobús de campaña -el Adolfomóvil- donde efectúa sus desplazamientos. La capital castellana tiene alcalde socialista desde 1979 -Tomás Rodríguez Bolaños, presidente de la Federación de Municipios-, y supondrá, según los sondeos, una de las claves del ascenso del partido centrista en Castilla y León, donde tiene al alcance convertirse en segunda fuerza política de la comunidad autónoma.Fervor suarista

Las 2.500 personas presentes en las gradas durante el mitin, constituyeron uno de los públicos más calurosos que han recibido a Suárez en esta campaña. En general, se trataba de una concurrencia que tendría una edad media de unos 35 años. A la salida del mitin, decenas de señoras besaron al presidente del CDS y algunos caballeros (ciertamente, bastantes menos) le saludaron con palmadas en la espalda y fervorosas caricias. Suárez devolvió algunas de esas palmadas con especial contundencia.

El público de Valladolid arropó más a Suárez que el de Segovia, donde la noche anterior había pronunciado un discurso ante las gradas no totalmente llenas del frontón cubierto. Precisamente en la capital segoviana Suárez había comentado: "Quien diga que hemos , pactado está mintiendo", al tiempo que mostró su deseo de que la campaña durase un poco más "para deshacer los mensajes falsos de los adversarios".

Si la media de edad de los presentes en Valladolid podía situarse en torno a los 35 años, en Ávila el público era mayoritariamente joven. Suárez agradeció a sus paisanos el continuo apoyo electoral que le han prestado "incluso en los momentos más difíciles". La última frase de Suárez en su feudo abulense fue el siguiente augurio: "Os aseguro que de nuevo un abulense volverá a ser presidente del Gobierno".

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Sobre la firma

Álex Grijelmo
Doctor en Periodismo, y PADE (dirección de empresas) por el IESE. Estuvo vinculado a los equipos directivos de EL PAÍS y Prisa desde 1983 hasta 2022, excepto cuando presidió Efe (2004-2012), etapa en la que creó la Fundéu. Ha publicado una docena de libros sobre lenguaje y comunicación. En 2019 recibió el premio Castilla y León de Humanidades

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