Un importante naviero gallego, muerto de una puñalada en el corazón durante un atraco

Joaquín Menéndez Ponte, de 59 años, naviero gallego, presidente de la Compañía Marítima Ponte Naya, de La Coruña, y cuñado del marqués de Feria, murió en la madrugada del lunes en Madrid de una puñalada en el corazón que le asestaron dos hombres jóvenes, a la altura del número 10 de la calle de Balbina Valverde. El fallecido salió en defensa de su cuñado, Alvaro Cruzat y Salazar, a quien los atracadores consigmeron finalmente robar el coche.

La muerte del naviero ocurrió aproximadamente, a la 1.20 de la madrugada de ayer, lunes. Joaquín Menéndez y su esposa, Teresa Cruzat y Salazar, hermana del marqués de Feria, ocupaban un vehículo Citroen Visa, de color blanco, matrícula NA-9742-, conducido por Álvaro Cruzat y Salazar, hermano de la mujer de la víctima, y en el que también iba Virginia Zubiria Garnica, esposa de éste último.Los dos matrimonios habían ido a cenar juntos. Joaquín Menéndez y su esposa habían llega do a Madrid hace una semana para visitar a una de sus hijas María, y a sus nietos, en cuya casa estaban alojados, en el domicilo citado antes. Cuando el matrimonio estaba ya entrando en el portal, oyeron gritos y

observaron que Alvaro era atacado por dos hombres jóvenes que intentaban apoderarse del vehícu lo, en cuyo interior aún se encon traba Virginia Zubiria.

En defensa de su cuñado

Joaquín Menéndez corrió en defensa de su cuñado, y en la refriega recibió dos puñaladas en el pecho. Los atracadores consiguieron por fin montar en el vehículo y alejarse del lugar. Un centenar de metros más adelante arrojaron del coche en marcha a Virginia, después de robarle las joyas que llevaba, sortijas, pulseras y un collar. La mujer sólo sufrió algunas contusiones leves.Mientras tanto, una vecina, alarmada por los gritos y los ruidos de la pelea, llamó a la policía, que sólo pudo trasladar al herido al hospital Gregorio Marañón, donde ingresó ya cadáver. La vecina en cuestión, una mujer joven, declaró a este periódico: "Oí los gritos y me asomé a la ventana. Pude ver que dos hombres jóvenes estaban pegando patadas y golpes a dos hombres mayores, uno ya caído en el suelo. En el coche había otra señora. Los dos atracadores se marcharon en el coche, mientras uno de los hombres mayores, tremendamente nervioso, gritaba algo así como se llevan a mi mujer, han herido a mi cuñado. Llamé a la policía, y algunos vecinos bajaron a la calle. Fue todo muy rápido".

En la mañana de ayer se encontraban en el Instituto Anatómico Forense familiares de la víctima y de su esposa. Álvaro Cruzat y Salazar llegó poco después -había ido a recibir al aeropuerto de Barajas a otro dé los cuatro hijos del fallecido, Pedro, que llegaba de Irlanda-. Álvaro Cruzat declaró: "Todo sucedió cuando mi hermana y mi cuñado estaban ya entrando en el portal y yo me disponía a poner en marcha el coche. Se abalanzaron contra nosotros dos chicos jóvenes, aunque yo sólo vi con cierta claridad a uno de ellos. Me defendí como pude, y de repente me vi fuera del coche y mi cuñado que venía a ayudarme. Mi impresión es que querían robarnos. Tal vez vieron las joyas que llevaba mi mujer".

Toda la familia del naviero se desplazó a Madrid al conocer la noticia. En el domicilio de La Coruña sólo quedó -una hermana, que ayer estaba demasiado afectada para hacer declaraciones.

Un portavoz de la dirección de la Compañía Marítima Ponte Naya afirmó: "Nos hemos enterado esta mañana [por ayer], y aún no hemos podido reaccionar. Estamos consternados. Joaquín tenía que haber llegado a su despacho esta mañana. Ha sido una muerte absurda, como están ocurriendo muchas últimamente. Ha sido una verdadera desgracia".

Fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid informaron ayer que aún no se tenía ninguna pista sobre la identidad de los homicidas. El vehículo robado tampoco había aparecido.

El sepelio de Joaquín Menéndez se celebrará hoy en La Coruña. La víctima era economista, y había sido consejero del Banco del Noroeste, del grupo Rumasa, en la época en que lo presidía Nicolás Franco Pascual de Pobil; presidente de la Compañía Marítima Ponte Naya, consejero de la Naviera Astur-Galaica, SA, presidente de Promociones Pecuarias, SA, y consejero de Air Spain. Tenía cuatro hijos.