Los partidos regionalistas buscan un sitio en Estrasburgo
Hipólito Gómez de las Roces, presidente y lider indiscutido del Partido Aragonés Regionalista (PAR), ha preferido seguir en su escaño en el Congreso de los Diputados -donde ocupa plaza en el Grupo Mixto tras abandonar una ligazón temporal a Coalición Popular- y ha dejado la cabecera de la candidatura europea a Juan Antonio Bolea Foradada, ex presidente de preautonómica Diputación General de Aragón y ex presidente de UCI) de Zaragoza.El PAR, partido conservador e "inspirado en el humanismo cristiano", como lo ha definido Gómez de las Roces, es acaso el primero de los partidos regionalistas en activo desde la primera legislatura democrática y con una clientela fija desde entonces.
La candidatura europea del Partido Andalucista está encabezada por su presidente Pedro Pacheco, abogado de 38 años. Pacheco, que ha renunciado ya a su cargo de diputado en el Parlamento andaluz, piensa simultanear la alcaldía de Jerez, que ha ocupado en los últimos años, con ese deseado escaño en Estrasburgo, que no cree se le escape de las manos. Pacheco, espera conseguir buena parte de los votos necesarios en su territorio, Jerez. El número dos en esta candidatura andalucista es el secretario general del PA, el economista Salvador Pérez Bueno, y en ella figura también en el puesto número cinco el escritor José Aumente. Los dirigentes del Partido Andalucista tienen como principal objetivo en Europa intentar nivelar las actuales desigualdades que existen en el presupuesto comunitario.
Los intereses de Cantabria
Otra de las candidaturas específicas de una región es la encabezada por el alcalde de Santillana del Mar (Cantabria), Francisco Javier Rosino, de 44 años, del Partido Regionalista de Cantabria. La presentación de Regionalistas Cántabros a las elecciones europeas tiene como principal objetivo la defensa de los intereses de Cantabria, "y particularmente los surgidos a raíz de nuestra adhesión a la CE, que no son defendidos por los partidos de ámbito nacional", según Rosino,que se presenta a la reelección de la alcaldía.
Rosino señala que el desmantelamiento industrial que sufre la región, y sobre todo el desmantelamiento que se avecina en la industria ganadera, "pilar básico de la economía cántabra y surgido por la mala política agraria de la CE", son razones más que suficientes para intentar llegar a Estrasburgo. "Aunque sea una voz pequeña, es necesario que se nos oiga", dice Rosino, quien se muestra convencido de que el Parlamento Europeo tenderá en un futuro a convertirse en un Parlamento de las regiones.
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