Clausurada la Conferencia Mundial de Ciudades por la Paz

La Conferencia Mundial de Ciudades por la Paz se clausurá ayer en Madrid con un llamamiento internacional al respeto entre los pueblos y a la concienciación ante el peligro de la guerra nuclear. Los representantes de numerosas ciudades de todo el mundo, entre los que destacaron los alcaldes de Hiroshima y Gernika, poblaciones destruidas por la guerra, enumeraron las conclusiones de sus trabajos, iniciados el día 27 del presente mes de abril.Durante estos tres días se hizo hincapié en la importancia de los medios de comunicación para ofrecer una información objetiva, la obligación de los responsables sanitarios de informar a la población del peligro de la guerra nuclear y la de los Gobiernos de prohibir cualquier clase de armas de destrucción.

El actual alcalde de Hiroshima, Gord Kawai, recordó la tragedia sufrida por esa ciudad durante la II Guerra Mundial con el bombardeo atómico norteamericano y dijo que 350.000 ciudadanos quedaron afectados por la radiación. Gord Kawai agregó que, comparada con el armamento nuclear actual, la bomba de Hiroshima es, "simplemente un juego de niños".

El alcalde de Gernika, ciudad bombardeada y destruida por la Legión Condor alemana hace 50 años, leyó un manifiesto al mundo pidiendo la solidaridad y la libertad de los pueblos, para que hechos como éste "no vuelvan a repetirse". La deuda externa, la guerra en Centroamérica y la violencia como fenómeno social fueron los temas prioritarios tratados por los representantes latinoamericanos. Esta es la primera conferencia que se ha celebrado en España de Ciudades de la Paz.