Gutiérrez logra el primer triunfo español
ENVIADO ESPECIAL, Alfonso Gutiérrez protagonizó ayer, al sprint, la primera victoria española en la Vuelta. La etapa fue intensa y ello supuso que, pese a la llegada masiva, la clasificación general comience a colocar a cada uno en su sitio: el belga Vandenbroucke ya ha desaparecido de los primeros puestos. Los colombianos se favorecieron del recorrido irregular y volvieron a destacar en las cotas montañosas. El irlandés Kelly fue el décimo y se mantiene de líder. Su compañero del Kas el portugués Da Silva tuvo ocasión de demostrar que va a ser importante porque obligó a trabajar a todos de firme en los últimos kilómetros.
Gutiérrez llevaba ya varios días buscando el triunfo. Sus condiciones le permiten estar en la lucha cuando hay un sprint y, hasta ahora, todas las llegadas han sido en bloque. Tenía que ser ayer o nunca porque ya llegan las etapas montañosas y después las fuerzas quedan disminuidas. El final era largo, 1.500 metros de recta, y lo que hizo fue coger la rueda del italiano Rosola, vencedor en la segunda etapa, a quien sus compañeros de equipo le lanzaban. "Encontré sitio para salir y luego no tuve más que aguantar", explicó Gutiérrez.El desenlace, contado así, es sencillo. Pero ocurre que detrás queda otra historia, que comenzó 20 kilómetros atrás. Catorce corredores se escaparon, aguantaron sólo seis y entre ellos había uno considerado como peligroso, Da Silva, lugarteniente de Kelly y que, situado a 2.23 minutos de éste, 2.19 tras la bonificación de ayer, es un relevo perfecto para el Kas si el líder desfallece.
Los corredores del Teka trabajaron entonces como posesos para neutralizar la escapada porque Blanco Villar, el segundo en la general, despistado, no había entrado en la fuga. Las aspiraciones de este corredor, por ser más molestas que las de otros, peligraban y sus compañeros consiguieron, para él, la neutralización. La meta estaba a seis kilómetros y el sprint sentenciaría.
Esta intensidad final fue una prolongación de la que provocaron los tres puertos de tercera categoría, endurecidos por un recorrido a través de malas carreteras, continuas curvas y, ausencia de llanos hasta el final. Ridaura, a 4.02 minutos del líder, intentó la hazaña, que se quedó en un rodar en solitario durante 70 kilómetros. Luego llegó la exhibición colombiana, con nueve de los 12 puestos que puntuaban en el total de las tres cimas. Mariano Sánchez fue el español que mejor aguanto.
Fue tras estos pasos cuando hubo zafarrancho de combate en el pelotón con una fuga iniciada por Poisson, excelentemente clasificado, y que arrastró a Da Silva, que está a todas. Entonces le tocó trabajar de firme al Teka, ayudado, por el Orbea y el BH. No todos aguantaron y Vandenbroucke perdió su cuarto puesto al ceder 17.10 minutos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.