Nueva subida del precio del dinero para tratar de frenar el crecimiento de las magnitudes monetarias

El Banco de España volvió ayer a elevar el precio del dinero que facilita a bancos y cajas de ahorro para que puedan cubrir las exigencias legales de coeficientes hasta colocarlo en el 13,75% y proporcionando casi 680.000 millones de pesetas en el primer día de aplicación de la subida de un punto del coeficiente de depósitos obligatorios.La nueva subida, que ha seguido a un día en el que el Banco de España decidió no hacer subasta y proporcionar dinero a quienes se lo solicitaran a un tipo de 14,25%, no es sino un nuevo peldaño en la escalada de precios del dinero para tratar de controlar el crecimiento de las magnitudes monetarias, disparadas en el pasado mes de febrero hasta tasas imposibles de mantener para cualquier supuesto de aumento de precios, no sólo para el oficial del 5% para el conjunto del año.

El fuerte crecimiento de la demanda interna española que está teniendo lugar en estos meses ha forzado un aumento disparatado de la cantidad de dinero en circulación y un peligroso aumento del déficit comercial con el resto del mundo, que se ha multiplicado por cuatro en el pasado mes de enero en relación al mismo mes del año anterior.

Estas tasas de crecimiento tendrán un reflejo más o menos inmediato en los niveles de precios independientemente de cómo evolucione el resto de los componentes de los costes de producción, que son los que se tratan de corregir con la política monetaria restrictiva de forma que no se pueda acusar a la autoridad monetaria del hipotético desbordamiento de la tasa de inflación.

Menos consumo

La fórmula elegida es encarecer el precio del dinero, para disuadir algunos consumos o gastos de inversión y frenar de esta manera las tasas de crecimiento económico que se están alcanzando y que no parecen corresponderse con los que están teniendo lugar en otros países.Según esto, a mayor crecimiento económico se están correspondiendo mayores incrementos de las importaciones y no necesariamente mayores niveles de producción interna.

Esto es lo que se trata de evitar en la actualidad con las nuevas restricciones monetanas.

En el caso de que siguieran sin dar resultado estas medidas, el Gobierno parece estar decidido a adoptar otras medidas de restricciones directas del gasto que podrían ponerse en marcha en las próximas semanas, empezando por los propios gastos públicos.