Tres jóvenes mueren arrollados por el tren en Getafe, en dos accidentes distintos

Dos adolescentes, Jesús Vicente López-Tercero, de 12 años de edad, y un amigo suyo, Pedro Onteniente González, de 13 años, murieron en la noche del jueves al ser arrollados por un tren de cercanías, que cubría el trayecto Parla-Madrid, a la altura de Getafe. Les acompañaba Juan Carlos Onteniente, hermano del anterior, que no sufrió ningún daño físico. Apenas una hora más tarde, y a un kilómetro del anterior accidente, un joven de 18 años de edad, Pascual Madrid Martínez, murió al ser arrollado por otro tren.

Los padres y familiares de los tres jóvenes muertos coincidieron el viernes por la mañana en el Instituto Anatómico Forense de Madrid. Aplastada por lo sucedido y agobiada por la presencia de periodistas, Virginia González sufrió un pequeño ataque de histeria. Entre sollozos, la madre de Pedro Onteniente repetía sin cesar que no quería que sacaran fotos a su hijo muerto, cosa, por otra parte, que ningún fotógrafo había intentado. El padre del chico, Antonio Onteniente, más sereno, se ocupaba mientras tanto de los papeleos burocráticos para el traslado del cadáver a Daimiel, localidad ciudarrealeña donde viven.Los tres adolescentes, en lugar de ir al colegio nacional San Isidro el jueves, hicieron novillos y decidieron coger el tren y trasladarse a Madrid. Antes habían hecho otras escapadas similares, aunque no tan distantes de su pueblo.

Los tres adolescentes se apearon en la localidad madrileña de Parla y desde allí continuaron hacia Madrid andando por las vías. A las 20.15 horas del jueves, los tres muchachos vieron que se acercaba un tren desde Madrid en dirección hacia Parla. Juan Carlos dio un salto y se colocó en el margen de la vía. Su hermano y su amigo saltaron asimismo, pero al lado contrario, y se colocaron en medio de la segunda vía, sin advertir que también por ahí se acercaba otro convoy, éste en dirección a Madrid, que les arrolló y les causó la muerte instantánea. Al parecer, afirmaron los padres de Pedro Onteniente, que relataron lo que les contó su hijo, Juan Carlos, no se habían ido de casa, sino que era una escapada concebida como una pequeña aventura. Juan Carlos se encuentra ya en Daimiel, bajo la protección de la familia, que no quiere que hable con nadie, dado su estado psíquico, a causa de lo sucedido.

Su madre contó que el jueves, después de varias horas de la salida del colegio, dieron aviso al cuartelillo y se organizó una pequeña batida por el pueblo y sus alrededores. Fue casi a media noche cuando la Guardia Civil les comunicó lo que realmente había ocurrido.

Jugador de baloncesto

A las 21.40, apenas una hora y media después, y en un lugar de la vía férrea situado en las afueras de Getafe, a kilómetro y medio del anterior accidente, un joven de 18 años, Pascual Madrid Martínez, resultó también muerto cuando intentaba cruzar las vías y fue arrollado por un convoy, éste en dirección a Parla.Madrid vivía en Parla, a donde se dirigía después de una sesión de entrenamiento en el polideportivo San Isidro. El joven era jugador del equipo de baloncesto de la empresa Construcciones Aeronaúticas, SA (CASA).