Calderón quiere convertir a Luis en el Molowny del Atlético

Vicente Calderón aseguró ayer que tiene la intención de proponer a Luis Aragonés, ex entrenador del equipo, el puesto de manager general del Atlético, al estilo del cargo que ocupa Luis Molowny en el Real Madrid. Calderón, que regresó a Madrid el pasado domingo de Estados Unídos, donde ha pasado 20 días para atender, dijo, sus negocios y someterse a su chequeo médico anual, presidirá hoy la junta directiva del Atlético.Calderón ha sido muy críticado en las últimas fechas por sus ausencias del club, y por la mala temporada del equipo, que lleva ya tres entrenadores en cinco meses, tras la marcha en la pretemporada por enfermedad de Luis Aragonés, a quien sustituyó Vicente Miera, posteriormente relevado por Jesús Martínez Jayo. "Jayo dirigirá el domingo al Atlético contra el Sabadell, eso que no lo dude nadie, aunque como ocurre en todos los clubes y con todos los entrenadores la continuidad de estos depende siempre de los éxitos o fracasos del equipo", dijo Calderón.

El presidente del Atlético asegura que quiere poner en marcha "una restructuración técnica", y que la persona indicada paraocupar el puesto de máxima res ponsabilidad en este organigrama es Luis Aragonés. "No, aún no he hablado con Luis al respec to. Acabo de aterrizar, y no hay que olvidar que algunas decisío nes hay que realizarlas con pru dencia, porque esta junta se en cuentra en situación de interinidad". Aparte de conocer lo que opine'Luis Aragonés al respecto, una vez que se entreviste con Calderón, éste asegura que el Atlético "puede tener su segundo jugador extranjero antes de una semana".

Calderón, por último, tiene previsto reunirse con los asesores de Llorente, jugador del que se da como segura su marcha al Madrid al finalizar la actual temporada, a pesar de que el Atlético intente igualar una oferta de 50 millones del Madrid. "Queremos que Llorente siga aquí", dijo, "pero lo que no hemos fabricado ha sido la ley, el decreto 1006 de Relaciones Laborales de los deportistas, que permite a todos los jugadores romper su contrato y marcharse a cambio de una indemnización, que nosotros fijamos en 50 mi llones hace dos años, lo que me parece una buena idea porque en caso contrario se podría marchar a cambio de mucho menos dinero".