La marina mercante registra cinco veces más accidentes laborales que la construcción

El sector de la marina mercante española sufre de cuatro a cinco veces más accidentes laborales que la construcción, aseguró ayer Joaquín Buelga, secretario general del Colegio de Oficiales de la Marina Mercante (Comme).Este aspecto de la seguridad en el mar, "que no parece sensibilizar a la opinión pública a pesar de las pérdidas materiales y humanas que ocasiona", en opinión de Buelga, ha sido uno de los temas tratados en el II Congreso de la Marina Civil, que ha tenido lugar en Madrid durante el fin de semana pasado, en el que participaron empresarios, sindicatos y Administración. El Congreso ha servido para aunar criterios sobre la necesidad de regular el sector tanto desde el punto de vista normativo como económico-financiero, que de como resultado una marina civil eficaz y moderna capaz de hacer frente al reto de la CE".

El aspecto más llamativo de las conclusiones del Congreso ha sido la necesidad de proceder a la reforma de la Administración marítima civil, deslindando claramente las competencias de la marina de guerra, que tradicionalmente ha controlado y monopolizado los aspectos administrativos y penales de la marina mercante. Actualmente, tanto la Administración como los profesionales de la mar favorecen y reclaman la creación de una Secretaría de Estado del Mar en la que se concentren las actuales competencias dispersas en cerca de una decena de ministerios. Ésta ha sido una solución adoptada en casi todos loa países europeos del entorno español. Igualmente es necesaria la creación de un cuerpo de Servicios Marítimos similar al Cuerpo de Administrativos Marítimos francés.

Los aspectos más significativos de esta reforma administrativa de la marina civil, "que supondrá una verdadera revolución en la marina mercante española", en opinión de Rafael Lobeto, jefe del servicio de empleo del Instituto Social de la Marina, fueron concretados por una comisión interministerial conocida como Cominmar, que durante meses ha trabajado en el nuevo diseño administrativo del sector. Esta comisión elevó sus conclusiones al Gobierno, referidas a la creación de un módulo -la comentada secretaría de Estado- que integre los distintos organismos que entienden asuntos marítimos, la necesidad de deslindar las competencias civiles y militares proponiendo un modelo de personal marítimo y un servicio de guardacostas bien dotado.

Reforma administrativa

Esta reforma de la Administración marítima es vital para la realización del llamado Plan de Flota, lo que es tanto como la existencia futura de una flota mercante en España. El sector aportó al producto interior bruto (PIB) 236.000 millones de pesetas en 1984, equivalente al 19% del PIB del sector de transportes y el 1,1 % del total nacional, generando empleó directo e indirecto para 145.000 personas. La flota mercante española transportó en dicho año el 92,4% de las importaciones españolas y el 82% de las exportaciones.El sector, sin embargo, está afectado por una grave atomización, ya que solamente seis empresas cuentan en España con más de 10 barcos. Ello da idea del raquitismo de la marina civil española, que necesita el proteccionismo y las ayudas financieras del Estado para sobrevivir. Esta situación ha sido achacada a la ausencia de una política marítima, la preponderancia de la construcción naval frente al transporte marítimo y la carencia de una Administración marítima.