La plantilla del Madrid brinda por Petrovic en un cabaré

La plantilla madridista celebró en un cabaré el fichaje de Drazen Petrovic hasta muy altas horas de la madrugada. Antes, los jugadores cenaron con el directivo responsable del fichaje, Mariano Jaquotot. Iturriaga y Corbalán recogieron a Jaquotot en las oficinas del club, después de que la entidad celebrara reunión de jurita directiva. Jaquotot se dirigió a Iturriaga, quizá el jugador inás polémico por su sincera arilmadversión hacia el yugoslavo, y le dijo: "Esta noche soy todo tuyo".Los jugadores sólo pusieron una crítica ai fichaje: no haberlo conocido con anterioridad suficiente para evitar que, en el entrenamiento del lunes, la Prensa pudiera sacar jugo de algunas declaraciones en caliente.

La tensión por el jugador Iturriaga, que en alguna ocasión había amenazado con mostrarse incompatible en el mismo equipo con Petrovic, desapareció muy pronto, a. pesar de que en el entrenamiento manifestó: "Si me lo encontrara enfrente no sé si le daría la mano". Con su habitual ironía, Iturriaga concluyó así: "Bueno, está claro que en 1988 yo seré el capitán, seré el capitán de Petrovic". Iturriaga cuenta aún con tres años de contrato con el Real Madrid, por lo que coincidirá con Petrovic en la llemporada 1988-89, pero todas cuantas preguntas se le han hecho sobre una hipotética marcha a otro club han recibido la misma respuesta: "¿A qué otro club puedo ir yo ahora si a mí me gusta ganar en todos los partidos?"

Corbalán mostraba su habitual frialdad para sostener, una y otra vez, que el club siempre había realizado, en diferentes ocasiones, grandes fichajes; y éste era indudablemente un gran fichaje. "Es lo que había que hacer, porque esto es un negocio y se trata de ganar todo lo posible, con quien se pueda ganar. Está claro que Petrovic es un jugador con el que se puede ganar".

Alfonso Del Corral, otro jugador que ha sufrido el marcaje al yugoslavo, se adhirió a la óptica de equipo ganador: "De lo que se trata es de ganar y lo que está claro es que era muy peligroso que Petrovic fichara por el Barcelona". Todos brindaron por el hecho de que el Barcelona se haya quedado sin este fichaje.

Los dos jugadores norteamericanos hablaban poco del asunto. Larry Spriggs, porque desconoce absolutamente quién es Petrovic; y Branson, porque es consciente de que uno de ellos dos sobra para 1988. Biriukov, habitualmente parco en palabras, se limitaba a sostener que se trata de un buen fichaje. Biriukov será considerado, en el año 1988, a todos los efectos, un jugador español más.