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LA ECONOMÍA A CORTO PLAZO

El paro registrado aumentó en septiembre en más de 67.000 personas, después de disminuir durante seis meses consecutivos

El número de parados registrados durante el mes de septiembre fue de 2.710.141 -el 19,74% de la población activa-, lo que supone un aumento de 67.205 respecto al mes anterior, según los datos hechos públicos ayer por el Ministerlo de Trabajo y Seguridad Social. Este aumento del paro registrado se produce tras seis ineses en los que de forma ininterrumpida el desempleo ha venido disminuyendo. Paralelamente, las nuevas colocaciones crecieron en 284.184, de las que casi la mitad - 136.882- corresponden a contratos subvencionados o acogidos a alguna fórmula de fomento de empleo.Fuentes de Trabajo basaron el increrriento de nuevos parados durante el mes de septiembre en razones de estacionalidad: fin de la temporada turística, cursos académicos, etcétera. Sin embargo, no ocultalron que la cifra resultaba "muy alarmante". En septiembre de, 1985 el desempleo creció ligerarriente por encima de las 40.000 personas. Y en el mismo mes de 1984 se llegó a los 62.779.

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El paro disminuyó en construcción y agricultura, aunque en cifras muy pequeñas -1.826 en el primero de los sectores y 2.370 en el segundo-, y aumentó en el colectivo de personas que buscan primer empleo (38.462), en servicios (28.789) y en industria (4.150). Aún así, fuentes de Trabajo destacaron que la actual cifra de parados es inferior en 95.000 personas a la registrada en enero de 1986.

Aunque estos datos eran conocidos antes del debate sobre la economía sumergida, se ha evitado cualquier filtración previa en la idea de que su difusión podría agriar un debate que no hajustificado las expectativas despertadas en un principio.

Durante seis ineses consecutivos el paro se ha venido reduciendo en lo que medios oficiales calificaban de "tendencia positiva". La ruptura de esta tendencia ha provocado un fuerte desánimo en sectores gubernamentales. Para paliar en parte la nueva situación, el ministro de Trabajo, Manuel Chaves, pondrá en marcha en los próximos días la parte del Acuerdo Económico y Social (AES) referida a protección por desempleo.

El plan negociado con la comisión de seguimiento del AES en los primeros meses del año, no ha llegado a desarrollarse y los decretos siguen sin publicarse. En esencia, consiste en integrar a unas 335.000 personas paradas en el Plan de Formación e Integración Profesional (PFIP) financiado entre el Estado español y el Fondo Social Europeo, y aumentar el nivel de protección a trabajadores que hoy no tienen derecho a ello.

Cursos de formación

La mayoría de los desempleados afectados por este plan pasarían a realizar cursos de formación, cobrando un subsidio por su asistencia. En otros casos, se trata de aumentar la cobertura, incluyendo a quienes, con cargas familiares y sin otros ingresos, han agotado las prestaciones. Con el conjunto del plan se persiguen varios objetivos: por un lado, alcanzar la tasa de cobertura prevista en el AES: el 43% para 1985 y el 487. para 1986. Y, por otro, rebajar las cifras de desempleo.Según los nuevos criterios estadísticos, toda persona que acuda a un curso de formación y cobre por ello no es parado, sino demandante de empleo. La diferencia no es sólo de definición. En el momento en que se aplique el plan, 250.000 personas desaparecerán de las estadísticas.

Pero ni siquiera parece que vaya a cubrirse el objetivo de aumentar la cobertura. El propio ministro de Trabajo, Manuel Chaves, reconocía hace unos días que, a pesar de la puesta en práctica de este plan, no se cumplirá con el compromiso recogido en el AES, acuerdo en el que el Gobierno se comprometió a subir el nivel de cobertura al 43% en 1985 y al 48% en 1986. De rriomento, 1985 se cerró con sólo el 32% de los parados protegidos.

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