Checoslovaquia se dispone a recibir las primeras inversiones industriales de Occidente

ENVIADO ESPECIALChecoslovaquia negocia con firmas danesas y japonesas las primeras inversiones industriales de Occidente que recibirá este régimen comunista, uno de los más ortodoxos y colectivizados desde que las tropas del Pacto de Varsovia terminaron hace ocho años con la primavera de Praga. Se trata de los primeros pasos hacia un plan experimental de formas económicas interiores y de apertura a los países capitalistas.

Las autoridades de Checoslovaquia, estado federal que tiene centralizadas las tres cuartas partes de su comercio con otros países socialistas, han declarado el propósito de profundizar la cooperación con Occidente durante la feria internacional de construcciones mecánicas de Brno, en la que han participado durante dos semanas 2.500 expositores de 31 países, y la han visitado 480.000 personas, la mayoría de ellas trabajadores de todo el territorio.

El protagonismo informativo de la feria, al margen de los tradicionales comunicados sobre contratos consagrados en la misma este año por 48.000 millones de coronas, casi medio billón de pesetasha estado en los proyectos para computerizar la industria con el fin de hacerla más productiva y menos consumidora de materias primas. Ésto requiere, según los análisis oficiales, tecnologías extranjeras y reformas económicas. Las vías políticas quedaron abiertas en marzo por el XVII congreso del Partido Comunista, si bien los observadores occidentales coincidieron en que de una forma tímida y menos decidida que en Hungría, la RDA, Bulgaria, o la propia URSS de Gorbachov.

Los portavoces oficiales han dado otra impresión, al informar que ya está superado el debate ideológico que frenaba la posibilidad de autorizar inversiones extranjeras en el sector industrial, donde se ha anticipado tímidamente Hungría, pues las, empresas mixtas existentes en otros países socialistas trabajan en el sector de servicios. Las primeras sociedades mixtas están siendo negociadas: acaba de ser firmado el contrato para que la empresa danesa Tessek instale una fábrica de materiales clínico y de diagnóstico, y hay avanzadas negociaciones con varias firmas japonesas para producir en Checoslovaquia vídeos y aparatos compactos. La RFA, Austria, Italia, Francia y Estados Unidos han recibido información oficial para que la transmitan a las empresas interesadas.

En minoría

Al menos hasta ver si los resultados de las primeras experiencias merecen una ley específica de protección y fomento de las empresas mixtas, las sociedades extranjeras no podrán superar el 49% del capital en la asociación o sociedad anónima mixta, las dos formas jurídicas permitidas, las inversiones extranjeras han de materializarse en máquinas, equipos, tecnología y know-how, personal técnico y medios financieros. Pero los inversores podrán exportar libremente beneficios.Las empresas mixtas funcionarán con independencia de los planes estatales, en el sentido de que podrán comerciar con cualquier país en moneda convertible y acceder a regulaciones especiales para la mano de obra, y ello ha abierto en medios occidentales amplias expectativas de reformas futuras de la economía checoslovaca.