Casi seis millones de trabajadores elegirán después del verano a 300.000 delegados sindicales
Los sindicatos han comenzado a preparar sus estrategias con vistas a las próximas elecciones sindicales que, con carácter oficial, se llevarán a cabo durante los tres últimos meses del año. En esta ocasión serán 5,7 millones de trabajadores los que tendrán derecho al voto -más que en ninguno de los anteriores comicios-, que habrán de elegir a más de 300.000 delegados. A estas cifras hay que sumar casi un millón de ftincionarios, que por primera vez acudirán a las urnas para elegir a sus representantes.
Desde 1982, último año en el que se celebiraron elecciones válidas para determinar el grado de representatividad de las organizaciones obreras, se han elegido algo más de 35.000 delegados, que no computarán a la hora de decidir qué formación ha resultado ganadora. La normativa electoral sólo considera válidos a efectos de representatividad a aquellos, que hayan salido electos en los comicios que se celebren en los meses de octubre, noviembre y diciembre.Hasta 1982 las elecciones sindícales se venían celebrando cada dos años y eran computables todos los delegados elegidos en ese período. En 1982, el Instituto de Mediación, Arbitraje y Conciliación (IMAC), organismo que hasta entonces estaba encargado de contabilizar los resultados, decidió que sólo se considerarían resultados válidos a efectos de representación sindical los obtenidos en el período comprendido entre el 115 de marzo y el 31 de diciembre de 1982.
La decisión del IMAC -ya con los socialistas en el poderlevantó no pocas polémicas, sobre todo porque daba la razón a UGT, que propugnaba un período electoral reducido.
Los enfrentamientos entre los sindicatos -especialmente entre UGT y CC OO- traspasaron demasiadas veces la línea de la ética y el comportamiento democrático. Acusaciones mutuas de fraude, delegados que, como el Cid Campeador, eran elegidos después de muertos -como el que se apuntó UGT-, ataques verbales, agresiones físicas... Nada se ahorró en una batalla que únicamente sirvió para desprestigiar a los sindicatos.
Entre el 15 de marzo y el 31 de diciembre de 1982 se eligieron 140.770. delegados. Unión General de Trabajadores, por primera vez, se alzaba con la victoria, con una diferencia de algo más de tres puntos sobre CC OO. La central socialista conseguía 51.672 delegados; CC OO, 47.016; USO lograba 6.527, y el resto se distribuía entre no afiliados, organizaciones independientes y las centrales de carácter nacionalista.
Nueva ley
La ley de Libertad Sindical de 2 de agosto de 1985 cambiaría notablemente los criterios sobre elecciones. La nueva legislación establece que el mandato de los delegados sindicales dure cuatro años y que el período de cómputo no exceda de tres meses.Cuatro años después de aquellas elecciones, los sindicatos se preparan a una nueva batalla que promete ser al menos igual de agria. En esta ocasión son 5,7 millones los trabajadores que en teoría pueden acudir a las urnas para elegir a más de 300.000 delegados, y por primera vez un millón de funcionarios entrarán en la liza electoral. Como dato significativo, hay que señalar que 191.000 delegados corresponden 90.000 empresas, que emplean más de tres millones de trabajadores. Son empresas con plantillas de menos de 30 empleados, en las que los sindicatos mayoritarios tienen poca implantación.
Será posiblemente en estos centros de trabajo donde mayor facilidad de fraude se registre. Los sindicatos -incluyendo a CC OO y UGT- no han tenido en el pasado ningún escrúpulo en elaborar actas de elecciones que ni siquiera se han celebrado.
Desde 1982 hasta fechas recientes se han elegido más de 35.000 delegados, que no computarán en los resultados finales. Aunque por parte de la Administración se ha mantenido un riguroso silencio sobre quién va ganando en estos comicios ya celebrados, fuentes de absoluta solvencia han asegurado que se mantiene una pequeña diferencia a favor de UGT -un punto aproximadamente- y suben sobre todo los no afiliados e independientes, que han obtenido casi el 43% de los delegados.
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