Artistas de izquierda viajan a Alicante para apoyar la candidatura de Cristina Almeida

"No vengo cargada. Es una tónica". Con esta alusión a las recientes acusaciones hechas por el vicepresidente del Gobierno al secretario general del PCE comenzó este fin de semana la conferencia de prensa de la ahogada Cristina Almeida, cabeza de lista de Izquierda Unida por Alicante, a la llegada de los autobuses y coches de Madrid y Barcelona en caravana de apoyo a su candidatura. Víctor Manuel, Ana Belén, Juan Diego, Rosa León, Amaya Uranga y Claudia Gravi fueron algunos de los artistas que estuvieron presentes en la caravana de amigos de la ahogada.

"Izquierda Unida tiene nombre de mujer", fue uno de los lemas utilizados por la candidata. El también abogado Nacho Montejo, uno de los organizadores de la caravana, explicó la adhesión a Cristina Almeida diciendo: "Vemos en ella a toda una generación que hemos vivido la clandestinidad, la transición y el régimen de libertades".La número uno de Izquierda Unida por Alicante habló el sábado en un mitin en el polideportivo de Alicante ante un público pródigo en jóvenes y mujeres, y habló, convincente y convencida, emocionada y torrencial, no sólo de los problemas de los alicantinos, que parece haberse aprendido en poco tiempo, sino de conceptos no demasiado habituales en los discursos políticos, tales como la felicidad, la ilusión, la amistad, la alegría, el compromiso, la solidaridad, la transformación de la vida cotidiana y otros como la universalidad de la izquierda.

Rápida en incorporar a su discurso de luchadora de siempre las especificidades locales, Cristina Almeida aludió a la necesidad de aportar a Europa, tras la incorporación de España al Mercado Común, los valores de la cultura mediterránea; y se dirigió en repetidas ocasiones a las mujeres: "No se puede hacer una ley de aborto para que el ministro de Justicia o los hombres del Parlamento nos digan en qué momento nos dejan abortar", dijo. Y añadió: "Además, las mujeres no queremos abortar, sino acceder a una información sexual que nos permita tener unas relaciones más bonitas, un proyecto de afectividad". La lucha contra la doble moral y la represión y discriminación de las personas en relación con el sexo estuvo también muy presente en el discurso de la candidata.

"Un poquito de poder"

Tanto en Alicante como en otros mítines durante el fin de semana, en Santa Pola, Elda o Novelda, Cristina Almeida habló de la necesidad de moralizar la política. "Dicen que somos utópicos", manifestó. "Pero yo les digo: que nos dejen un poquito el poder, que vamos a convencerles de lo que podemos hacer, porque si no hubiéramos sido utópicos durante 40 años, todavía seguiríamos pensando que los principios fundamentales del Movimiento eran inamovibles y que todo estaba atado y bien atado. Yo no creo que pueda haber una ética personal y otra política. No puedo desdoblarme ni me he desdoblado nunca ni en la cama, n¡ en la mesa ni en los tribunales".

Entre las adhesiones recibidas figuraba la del fiscal José Antonio Martín Pallín, presidente de la Asociación de Derechos Humanos, que decía: "Esperamos que traigas la playa a Madrid". Cristina Almeida opinó que eso no es lo más difícil que le han pedido en la campaña. La solicitud más problemática que ha recibido esta extremeña de origen, laboralmente pasada por Madrid, ha sido justamente que sea de Alicante. "Creo que es coherente que me lo pidan", afirmó, "porque la gente quiere que sea de donde estoy. Ya que no puedo dar lo primero, al menos intentaré estar".

En relación con lo anterior ¿por qué Cristina Almeida no fue incluida en la listas de IU por Madrid, donde más ha trabajado y donde es más conocida?. Ella explica: "Personalmente, fue una contradicción; y no porque yo propusiera ir en un lugar u otro, ni siquiera ir de candidata. Sí condicioné mi participación a no ir en un puesto simbólico, sino de decisión. Ir en Madrid la tercera o después habría supuesto no estar en el Parlamento. Hablé con mis amigos y con gente de Alicante, y me dijeron que aquí, como cabeza de candidatura, existía una posibilidad Hay mucha gente que está mal, y si mis amigos han venido aquí no es sólo por apoyarme a mí, sino por identificarme con mi forma de hacer política. Pienso que en Izquierda Unida ha habido una concepción de la política antigua y muy poco abierta, porque si intentas articular un movimiento amplio de izquierda no puedes plantear que cada partido deba llevar tanto o cuánto en las listas. La izquierda debe transformarse y no ser sectaria. Yo creo que si me hubiera presentado por Madrid habría dado otra imagen".

Pese a que en Cataluña no se ha conseguido integrar al escindido Partido de los Comunistas de Cataluña (PCC) en el equivalente a Izquierda Unida, varios abogados, algunos miembros del comité central del citado partido, como el veterano Luis Salvadores, estuvieron presentes en la caravana.

El hecho de que el obispo de Alicante haya pedido a los fieles que no voten a los socialistas ¿puede significar que está apoyando a Cristina Almeida de refilón, o que han llegado a un trato?. Con su vozarrón y socarronería habituales, la candidata responde: "Me he sentido muy contenta de que el obispo no me haya colocado en la excomunión, pero no le he hecho ninguna concesión parroquial".

Después de una comida ayer en la playa con casi 300 personas, la caravana de amigos de Cristina Almeida coreó "oa, oa, oa, Cristina a la Moncloa". "No estaría mal", dijo la candidata sin inmutarse. "Felipe empezó también en el Parlamento. Bueno, empezó en la oposición, y creo que un poco después que yo".