Harold Washington,
alcalde de Chicago (Illinois), ha conseguido una rara unanimidad en el concejo municipal, que votó el pasado miércoles una resolución declarando la ciudad zona desnuclearizada. Chicago, en cuya universidad se produjo hace 43 años la primera fisión nuclear, es la mayor entre las 40 ciudades estadounidenses que han adoptado acuerdos similares. El texto aprobado establece que nadie "podrá diseñar, desplegar, lanzar, mantener o almacenar proyectiles nucleares o sus componentes", y prevé multas de 1.000 dólares (140.000 pesetas) y 30 días de cárcel por cada día de quebrantamiento de la ley. El que no parece muy contento es James Thompson, gobernador de Illinois, a quien la decisión le parece "estúpida y contraria al sentir estadounidense".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.