Tres españoles, detenidos en Roma por la muerte de un marsellés
Tres españoles fueron detenidos en la madrugada de ayer, en Roma, después de haber causado, presuntamente, la muerte de un marsellés, de 47 años, al que arrojaron a un camión de recogida de basuras que literalmente lo hizo pedazos. Los detenidos son Josep Buiques Querol, de 39 años, natural de Barcelona; Antonio Begran Escobar, sevillano, de 41 años, y Juan Muñoz Jurado, natural de Málaga. Todos ellos toxicómanos y con antecedentes penales, en España, por tráfico de drogas.Después de intentar negar su participación en el crimen, los detenidos acabaron confesándose autores del mismo. Por lo que fueron trasladados a la cárcel de Regina Coeli, en el centro de Roma, acusados de homicidio voluntario con agravantes.
El suceso sucedió hacia las 3.30 horas de la madrugada de ayer en la plaza de los Santos Apóstoles, en pleno centro de Roma. A esa hora, los tres españoles arrojaron a Simón Mattuecci, con quien poco antes habían mantenido una violenta riña, a un camión de la basura que, en ese momento, trituraba los desechos que los empleados del Ayuntamiento iban recogiendo de las calles.
Fue el conductor del camión quien, al oír un ruido proveniente de la parte posterior del vehículo y notar que la máquina trituradora se atascaba, se bajó de la cabina para averiguar que sucedía. Antes, sin embargo, tuvo el reflejo de mirar por el espejo retrovisor y pudo ver como tres hombres se alejaban apresuradamente.
Aunque aterrorizado por el descubrimiento -las cuchillas se habían tragado ya todo el cuerpo, a excepción de una pierna-, el hombre reaccionó enseguida llamando a gritos a sus compañeros y volvió a la cabina para detener la máquina. Pero su acción ya era inútil y lo único que los empleados de la limpieza pudieron hacer fue avisar a la policía. Ésta, después de recoger el testimonio de varias personas que habían visto salir a los cuatro hombres de un bar, y tras dar una rápida batida por la zona, logró detener a los tres presuntos homicidas, que se habían dado a la fuga a pie.
El propietario del local reconoció después a los detenidos como los acompañantes de Simón Matteuci. Los tres españoles se encontraban en Roma desde hace pocos días, se alojaban en un hotel del centro y no conocían al marsellés antes de la disputa.
