Real Madrid y Joventut disputan una final con descalabro económico

La celebración de la Copa del Rey en el Palau Blaugrana ha puesto de manifiesto el mayor descalabro económico-deportivo de una entidad deportiva en una competición nacional de cierta relevancia. La asociación de clubes es consciente de que por un millón menos de los 15 ofrecidos por el Barcelona, la Copa del Rey hubiera sido un éxito seguro en Murcia. Entre tanto, Real Madrid y Ron Negrita Joventut aguardan expectantes qué aspecto tendrá el Palau en la final que se disputa hoy (a las 18.40, por TVE).

A excepción del FC Barcelona, todos los integrantes de esta competición critican la organización que ha llevado a cabo el club azulgrana. Centro de las principales quejas es el precio de las localidades, considerado desde un primer momento como abusivo. Un aficionado tendría que haber gastado 7.000 pesetas para poder presenciar todos los encuentros, por 4.000 un socio del club.Para la final de hoy sólo se contemplaban dos tipos de localidades: 3.000 pesetas la entrada normal y 1.500 la de socio. Si se tiene en cuenta que el aficionado tipo al baloncesto ronda una media de edad de 20 años, con una capacidad adquisitiva muy inferior, por tanto, al espectador de fútbol, estas cifras resultaban casi inalcanzables. El fracaso, anunciado días antes de comenzar el torneo, se hizo realidad el pasado martes cuando dos encuentros de máximo interés sumaron 2.000 espectadores, circunstancia sobresaliente si se tiene en cuenta que el Palau Blaugrana ha llegado a registrar más de 5.000 para un partido Barcelona-Magia de Huesca de la Liga, uno de los considerados como de menor interés.

La organización que ha llevado a cabo el Barcelona no ha sido, por otra parte, modélica, a la vista del descontento reinante entre el resto de clubes participantes. Según éstos, el club azulgrana, a cambio de 15 millones, ha querido tener la exclusiva del acontecimiento como una fiesta particular. El club se ha mostrado remiso a negociar la venta de un importante paquete de localidades al Ron Negrita Joventut, incluso después de conocerse su condición de finalista; las exigencias que ha impuesto para los horarios de entrenamiento y la estancia hotelera de CAI Zaragoza y Real Madrid han sido consideradas como de mal gusto.

Se da la circunstancia de que el Joventut ha realizado casi todos los entrenamientos en su propia cancha, viéndose obligado a despreciar los horarios ofrecidos por el Barcelona. Teniendo en cuenta que, aparte de lo ofrecido en la subasta, el club organizador corre con otra serie de gastos, puede estimarse que, caso de que el público badalonés no responda espontáneamente con su presencia en la final, el déficit económico puede superar los citados 15 millones.

La revancha

En el aspecto deportivo, el Real Madrid afronta el partido con un cierto aire de revanchismo por su derrota ante el Joventut en la Supercopa jugada hace un par de meses en Valladolid, según informa Pedro Barthe. Aunque los jugadores de Lolo Sainz pensaban encontrarse en la final al Barcelona, no van a cambiar sus planteamientos. El entrenador madridista comentaba ayer que "el Joventut ha demostrado que puede ganar a cualquiera. Nosotros no vamos a cambiar nuestros sistemas, ni la preparación que habíamos realizado para esta copa, aunque sí es cierto que esperábamos otro rival en la final".

Andrés Jiménez, el jugador internacional del Ron Negrita Joventut explica el encuentro de la siguiente forma: "Es muy dificil repetir una victoria ante otro de los grandes en tan breve espacio de tiempo. Para nosotros, el gran partido era el del Barcelona, ya que no podíamos plantearnos el que íbamos a jugar la final. Nuestra final era el primer encuentro. El Real Madrid es el favorito, tienen mejor equipo que nosotros, si hubiese ganado por más de 20 puntos al CAI todavía sería mayor su condición de favorito, ahora tendrán más precauciones. A nosotros siempre nos interesa que el papel, de favorito lo tenga el equipo contrario".