El PNV celebrará en diciembre una nueva asamblea para debatir su crisis interna

La comisión del PNV encargada de elaborar un diagnóstico definitivo de la crisis interna de este partido presentará sus primeras conclusiones en la próxima Asamblea Nacional, el 14 de diciembre. La idea de delegar en esta comisión la búsqueda de soluciones fue adoptada en la Asamblea Nacional del pasado sábado en Artea (Vizcaya) y no contó con el apoyo de los representantes guipuzcoanos, alineados en el sector crítico.

La comisión, integrada por tres representantes de cada organización regional (Vizcaya, Alava y Navarra) reproduce la correlación de fuerzas existente hoy en el partido. El conflicto entre los sectores ofialista y critico sigue siendo la incorporación de los afiliados navarros expulsados, que sumaban la mayoría de la organización regional.

Mientras los representantes de la nueva Ejecutiva navarra exigen que la reintegración se produzca de forma individual, los guipuzcoanos plantean, a su vez, una incorporación conjunta y negociada. Fuentes nacionalistas han indicado que el documento elaborado por la dirección del PNV, no aceptado por el sector crítico, sí aborda expresamente el problema de los expulsados navarros.

Las mismas fuentes especulan ahora con la posibilidad de que el sector oficialista plantee una fórmula intermedia que permita incorporar a los expulsados sin que esto suponga entregarles el control de la Ejecutiva de Navarra. Esta fórmula permitiría al sector oficialista seguir ostentando una mayoría, todavía holgada, en la Ejecutiva del partido y en la Asamblea Nacional.