González Mariñas, el vicio por la literatura
Nacido hace 41 años, el mismo día en que el general Leclerc entraba en el París ocupado por las tropas alemanas, Pablo González Mariñas tiene el aspecto de un moderno profesor de universidad conocedor de los mecanismos de la política útiles tanto para defender ideas como parcelas de poder. No en vano participó ya en 1976 en la fundación del Partido Gallego Independiente, aunque él prefiere situar el inicio de su actividad política, en la Universidad. Para precisar este extremo advierte: "Pasé el mayo del 68 en la Complutense (Madrid), donde daba clases de derecho administrativo".Tras obtener seis diputados y tres senadores en coalición con UCD, militó durante una época en el entonces partido del Gobierno, para volver después a refundar el Partido Galleguista y promover en mayo de 1984, en Vigo, el congreso constituyente de Coalición Galega.
Su vicio es la literatura en general y los ensayos, la filosofía y la lírica en particular. Es un admirador de Baudelaire, Rimbaud y Kavafis, y con alguna frecuencia practica él mismo la creación poética. Le gusta la música, pero no es lo que se dice un melómano, y después de haber jugado al fútbol de extremo izquierdo -"cuando tenía 20 años y 20 kilos menos"-, practica el tenis alguna vez a la semana.
