La coalición conservadora belga mantiene la mayoría pese al avance socialista

La coalición gubernamental de centro-derecha que gobierna Bélgica ratificó en las elecciones generales de ayer la mayoría parlamentaria que ostentaba en la Cámara de Diputados saliente, al obtener 115 o 116 de sus 212 escaños, frente a los 113 que ya poseía, por lo que la alianza de democristianos y liberales continuará cuatro años más en el poder.Los socialistas obtuvieron 67 escaños debido a su gran triunfo en Flandes, donde ganaron seis actas con un programa que abogaba por el desmantelamiento de los euromisiles. La caída de los liberales flamencos se vio compensada por el ascenso de sus correligionarios francófonos.

Con el 50% de los votos escrutados quedaba claro que el electorado había vuelto a prestar su apoyo a los partidos tradicionales, en perjuicio de las formaciones minoritarias. Ello no ha impedido a los ecologistas ganar seis escaños. Los grandes derrotados de estos comicios son los nacionalistas flamencos del partido Volksunie, que ven reducida a 16 su actual representación, de 20 diputados, y el Partido Comunista, convertido en un grupo extraparlamentario.

El primer ministro, Wilfried Martens, agredeció anoche el apoyo recibido de un electorado que ha tenido que sufrir los efectos de una política económica de rigor. "La austeridad ha sido recompensada por primera vez en Europa", dijo.

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