La mina se cobra una vida cada 48 horas

Durante el mes de septiembre la media de accidentes mortales en la minería asturiana ha alcanzado el triste récord de un muerto cada 48 horas. En apenas 12, siete mineros han perdido la vida sepultados bajo toneladas de carbón. Sólo dos de ellos sobrepasaban los 40 años. La edad de los otros cinco restantes va desde los 19, del muchacho muerto en La Rasa, en Tineo, a los 36 años del último de los mineros aplastado ayer en el pozo de Hunosa.

Aunque tal vez en los accidentes registrados en este último mes no sea la edad un factor determinante de las causas que lo provocaron, es curioso que viejos mineros, sindicalistas y responsables de la Administración coincidan en que la falta de preparación de los trabajadores sea una de las causas del accidente.

Las coincidencias acaban aquí. A la hora de buscar la verdadera razón de los accidentes, los sindicatos apuntan como primer factor la falta casi absoluta de medidas de seguridad, el ritmo acelerado de los tajos y la nula tarea de inspección de la Administración.

Sin embargo, resulta muy significativo que el mayor índice de accidentes se registre precisamente en la pequeña mina. De la treintena de accidentes mortales ocurridos en Asturias en lo que va de año, nueve se han producido en pequeñas instalaciones que, en su conjunto, no reúnen a más de 1.000 trabajadores.