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El 'miniholding' electrónico del INI, pendiente de su constitución formal

En las próximas semanas debe quedar jurídicamente constituida la Empresa Nacional de Electrónica y Sistemas (Inisel), el miniholding informático del INI cuya creación fue aprobada por el Consejo de Ministros el pasado mes de mayo.Según esos planes, esta nueva forma legal de la división de electrónica e informática del sector público se concretará tras la absorción de Experiencias Industria les (Eisa) por parte de Equipos Electrónicos, y la posterior integración en la sociedad resultante de la participación que el INI tiene en la Empresa Nacional de Optica (Enosa) y en Eria. Hasta ahora no ha llegado a concretarse formal mente la nueva sociedad a consecuencia del retraso en la delimitación de los beneficios fiscales inherentes a esta operación.

Igualmente, el nuevo miniholding electrónico se hará cargo de las acciones que el Instituto Nacional de Industria posee en Telesincro, en Ingeniería y Sistemas Electrónicos (Isel) y en Digipower, tras los cambios en el accionariado efectuados hace meses en Secoinsa a raíz de la entrada mayoritaria en esta compañía malagueña de los japoneses de Fujitsu.

Trasvase de acciones

En la reordenación del accionariado de esta compañía, Telefónica adquirió al INI el paquete que tenía en Secoinsa, mientras que el Instituto Nacional de Industria se quedaba con las participaciones de esta empresa en Telesincro, Isel y Digipower. Por la adquisición de las acciones en estas tres empresas, el INI tendrá que pagar a Telefónica un total de 824 millones de pesetas -212 millones por su participación en Telesincro, 14,6 millones por las de Isel, más otros 597 millones de pesetas por Digipower.

Por el momento, y hasta que se constituya formalmente Inisel, la participación del INI en Telesincro es ostentada por Equipos Electrónicos, donde se está revisando la política a seguir con esa empresa, así como las posibilidades industriales que puede tener en el futuro. Uno de los esquemas que se barajan respecto a esta empresa, y que parece seguir siendo el que más posibilidades tiene de salir adelante, es el de la venta del 40% del capital de Telesincro a la firma informática francesa Bull, que ha mostrado desde hace tiempo su interés por concretar esta operación, y con la que Telesincro tiene lazos comerciales. En la factoría catalana de esta firma se fabrican terminales para la compañía francesa, que representan casi el 75% de su producción total.

Dentro de los previsibles planes del INI para con Telesincro no se descarta tampoco que en el capital de esta empresa pueda entrar también una tercera empresa, con lo que quedaría completado el accionariado a tres bandas.

Según las propias. estimaciones realizadas por el Instituto Nacional de Industria, Inisel tendrá unas ventas consolidadas de más de 20.000 millones de pesetas, con una plantilla de casi 3.000 trabajadores.

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