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Tablas en la segunda partida del Mundial de Ajedrez

Leontxo García

La segunda partida del Campeonato Mundial de ajedrez, que disputan en Moscú los soviéticos Anatoli Karpov y Gari Kasparov, terminó ayer en tablas tras ocho horas dé juego. Kasparov no pudo aprovechar su ventaja en el momento del aplazamiento que se produjo el miércoles. La tercera partida está prevista para hoy.El desarrollo de la segunda sesión fue catalogado como "muy interesante" por los especialistas. Kasparov se vio obligado a sacrificar sus dos peones pasados con el fin de penetrar con su torre en el campo enemigo. Aun así, su ventaja de material no fue suficiente para lograr la victoria. En la sala de análisis muchos pensaban que Kasparov pudo jugar mejor. Es probable que la discusión sobre este asunto dure todavía varias Jornadas.

Respecto a las partidas jugadas, aún se comenta sobre la única victoria del aspirante, basada, según la mayoría de expertos, en la ventaja conseguida en la apertura. Karpov quedó sorprendido. Ni siquiera su gran técnica defensiva resultó suficiente.

Kasparov sufrió una sensación parecida de indefensión en la apertura del rival, en noviembre de 1983, cuando fue literalmente cazado por Korchnoi con una novedad teórica, en la primera partida de las semifinales del torneo de candidatos, celebrada en Londres. Aquel día, Gari, ante la angustiada mirada de su madre, sentada entre los espectadores, intentó disimular su nerviosismo escondiendo las manos debajo de la mesa para poder retorcerlas sin que Korchnoi se diera cuenta.

Desde entonces han pasado muchas cosas. En el encuentro anterior contra Karpov, Kasparov pagó su desmedida agresividad con un contundente 0-5 en contra, que, tras cinco meses de lucha, se transformó en el definitivo 3-5. Se supone que en el maratoniano encuentro Kasparov aprendió muchas cosas, pero conviene recordar lo que alguien dijo sobre Karpov: "Puede sacar agua de una piedra".

En cualquier caso, la limpieza en la obtención de la única victoria por parte del aspirante estaba aún ayer presente en los comentarios de los aficionados durante los prolegómenos de la reanudación de la segunda partida. "El primer juego fue una línea recta desde la apertura hasta el abandono de Karpov", era uno de los comentarios que podían oírse en los vestíbulos.

Desde el pasado lunes, el ajedrez está presente en la vida cotidiana de las calles moscovitas. Los aficionados esperan la reacción de Anatoli Karpov, como sucedió ayer, aunque sólo para empatar, pero la primera victoria de Kasparov ha servido para elevar aún más el gran ambiente ajedrecista que se vive en las calles de Moscú.

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Sobre la firma

Leontxo García
Periodista especializado en ajedrez, en EL PAÍS desde 1985. Ha dado conferencias (y formado a más de 30.000 maestros en ajedrez educativo) en 30 países. Autor de 'Ajedrez y ciencia, pasiones mezcladas'. Consejero de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) para ajedrez educativo. Medalla al Mérito Deportivo del Gobierno de España (2011).

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