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Los fabricantes europeos entran en un mercado chino del automóvil casi monopolizado por Japón

En Shanghai, la ciudad más poblada de China, con unos 12 millones de habitantes, y 3,4 millones de bicicletas, la celebración de Auto motive-85-China, equivalente al primer salón del automóvil celebrado en aquel país, ofreció, el pasado mes de julio, un ejemplo del claro interés de los fabricantes europeos para llevarse una parte del mercado chino, hoy casi monopolizado por los productos made in Japan. Tres empresas españolas del sector, los camiones Pegaso, el fabricante de remolques Trabosa y el de baterías Tudor tampoco quieren perder el carro chino y es tuvieron presentes en la feria de Shanghai.

20 kilos de folletos

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Empresas españolas en la feria de Shanghai

"En 20 minutos agotamos 20 kilos de folletos", explicó un reponsable de la firma germana BMW, acosado por miles de visitantes chinos, que se quedaban pasmados ante los sofisticados motores de los veloces automóviles germanos.En el estand de Fiat los chinos contemplaban con asombro cómo dos coches Panda, junto a un vehículo con tracción en todo terreno, Iveco, cubrieron recientemente de Venecia a Pekín los 20.000 kilómetros del itinerario que el celebre Marco Polo recorrió, más lentamente, por la histórica ruta de la seda. Fiat es la segunda empresa europea de automoción, después de Volkswagen, con negocios importantes en el mercado chino.. "Creernos que los fabricantes europeos tenemos una oportunidad histórica en China, donde es posible llevarse una franja del mercado", comentó Raffaele Casofi, responsable del sector ínternacional de la firma italiana en la feria de Shanghai. Fiat firmó el pasado mes de marzo un acuerdo de cooperación mixta con China, para la fabricación de un vehículo de transporte de tipo medio, de cinco toneladas, del modelo Daily, del que espera fabricar unas 60.000 unidades dentro de dios años, cuando la fábrica sea operativa en la localidad china de Nimjin. También recuperó un viejo proyecto paralizado durante la época de la revolución cultural, para fabricar tractores en China. Ahora los chinos elaboran su propio motor, pero los europeos de Turín aportan cooperación tecnológica y accesorios para su montaje total, en el marco de, la ofensiva italiana hacia el mercado chino, en la que el grupo Fiat vislumbra incluso el sector de la robótica, o la mecanización de granjas, a través de una operación que cuenta con un fuerte apoyo financiero del Gobierno italiano.

Para los responsables de Volkswagen, cuyo modelo Santana circula ya por las carreteras chinas, el acuerdo de cooperación mixta con firmas locales es ya un éxito. En su primer año de producción se fabricarán 7.000 SantanaShanghai, 15.000 en 1986 y se espera llegar a 30.000 en 1990.

El grupo francés Renault coopera también indirectamente en la fabricación de losjeeps de la marca Beiging, a través de la participación de Renault en la empresa norteamericana American Motors, de la que Renault es accionista.

Cadillac para el Gobierno

¿Quién compra automóviles hoy en China? De momento sólo los servicios oficiales, o las empresas estatales, regionales o locales de taxis o de transporte de pasajeros y mercancías. Coincidiendo casi con la feria de Shanghai las autoridades chinas adquirieron una flota de 20 lujosas limousines de la marca Cadillac: que, siguiendo el ejemplo de beber Coca-Cola, demostraron que los más altos responsables del Gobierno optan por las tecnologías occidentales y capitalistas, relegando poco a poco en un segundo término los pesados semi automóviles-tanque oficiales del modelo Drapeau Rouge que llevan a los dignatarios chinos del partido de un lado para otro. Pero un simple automóvil Santana-Shanghai se vende en China al precio de 32.000 yuanes, impuestos aparte, lo que supone que, hoy por hoy, los chinos -con una renta per capita anual de unos 1.000 yuanes- deberían trabajar unos 30 años antes de poder adquirirlo. Por eso los chinos seguirán pedaleando todavía durante mucho tiempo, aunque quizás los frutos de la reforma y apertura económica puede que les acorte la carrera.

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