El Parlamento Europeo solicita medidas contra el vandalismo

ENVIADO ESPECIAL El Parlamento Europeo, reunido ayer en sesión plenaria en Luxemburgo, pidió que se tomen medidas en toda la Comunidad Económica Europea (CEE) para evitar el vandalismo y la violencia en el deporte. Entre las medidas solicitadas figura el refuerzo de la coordinación internacional entre los Gobiernos y las autoridades concernidas. La toma de postura del Parlamento se produce tras los acontecimientos del 29 de mayo en el estadio Heysel, de Bruselas, cuando antes del partido Juventus-Liverpool hubo 38 muertos.

Las brutalidades en los estadios "no son sino los síntomas de causas más profundas", señala el Parlamento en el informe y la resolución que defendió la eurodiputada liberal holandesa Jessica LariveGroenendaal.

Peter Sutherland, comisario responsable de estos temas en el Parlamento, sugirió una cooperación entre los países de la CEE, que implicaría a las autoridades locales, las policías y otras organizaciones. Entre otras medidas se pide la prohibición de la venta o consumo de bebidas alcohólicas y bebidas en botella o en lata en los alrededores o en los estadios; cachear a todos los espectadores y confiscar armas u objetos que pudieran servir de tales y carteles provocadores; y supresión de materiales inflamables en los campos.

El Parlamento pidió asimismo un control legal estricto de la venta de billetes y un aumento de las sanciones contra la reventa. También solicitó penas más duras contra los autores del vandalismo y que se enmarque más a los hinchas, tanto en los estadios como en sus desplazamientos.

En relación con la violencia en el deporte, el campo del Sydney Olympic, donde los aficionados agredieron a los jugadores del Sydney City esta semana, ha sido cerrado por la Federación Australiana de Fútbol, que ha dictaminado que no se volverá a abrir "hasta que los dispositivos de seguridad sean considerados adecuados". Mientras, la FIFA ha prohibido la celebración de un partido amistoso entre el Borussla Moenchengladbach y el Liverpool para el 5 de agosto. La FIFA sancionó a todos los equipos ingleses con la imposibilidad de jugar partidos en el extranjero a raíz de la tragedia de Heysel.