Primer incidente con el control 'antidoping'
J. M. S. El ciclismo siempre ha sido uno de los deportes más perseguidos y castigados por los controles médicos. Ayer, por este motivo, un director español, Rafael Carrasco, del equipo Kelme, protagonizó el primer incidente por lo que él considera una novedad.
Carrasco, al igual que todos los directores deportivos de los equipos participantes en la Vuelta a España, recibió la comunicación, antes de la etapa prólogo, de que el segundo frasco con la orina de los corredores elegidos para pasar el control antidoping no podía ser precintado por el equipo. "Lo que faltaba, ahora todavía estamos más indefensos", dijo.
Después de la carrera, Carrasco se presentó ante los comisarios de la Unión Ciclista Internacional que efectuaban el control médico, con un notario para levantar acta. "Quiero saber cómo se hace esto", dijo. No le dejaron entrar en el furgón, porque ninguno de sus corredores había sido citado para pasar el control. Y es que Carrasco está quemado por el positivo de su mejor hombre, Recio, en la Semana Catalana, recientemente celebrada, en la que venció.
"El recurso que hemos presentado en la Federación Española de Ciclismo sigue su curso. Queremos que se haga justicia. Ahora y siempre. Nada más", manifiesta Carrasco.
Pero mientras pedíajusticia, él y los restantes directores deportivos, pidieron clemencia para lograr que el cierre de control en las etapas más duras no sea tan severo, "porque nos vamos a quedar sin hombres a las primeras de cambio". En principio, parece que habrá una cierta flexibilidad. Todo dependerá del espíritu de lucha de que vayan mostrando los ciclistas en las próximas etapas.
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