Dirigentes, sindicalistas, concejales y diputados, entre los depurados

Entre los carrillistas expulsados ayer de los órganos dirigentes del Partido se encuentran cuatro miembros del Comité Ejecutivo (Carrillo, Adolfo Piñedo, Ignacio Latierro y Juan Villalba), dirigentes de organizaciones regionales y significados líderes de CC OO. Ni Piñedo, ni Villalba, ni Latierro podrán ser expulsados del Comité Central, aunque sí del ejecutivo, al menos mientras sean responsables de organizaciones regionales.Lo mismo ocurre con el secretario regional del PCE gallego, Julio Pérez de la Fuente, quien no pertenecía al comité ejecutivo, aunque sí al central.

Entre los expulsados del Comité Central se encuentran igualmente los sindicalistas Jufián Ariza, uno de los fundadores de CC OO a mediados de los años sesenta y Juan Ignacio Marín, uno de los principales líderes M sector del metal. Igualmente figuran el teniente de alcalde madrileño Adolfo Pastor y el portavoz comunista en la asamblea madrileña, Lorenzo Hernández; se trata de los dos únicos cargos públicos con que el PCE cuenta en la comunidad autónoma madrileña.

Otros expulsados del Comité Central (o autoexcluidos, según la versión oficial), son el propio hijo de Carrillo, el responsable de Valladolid, Ángel Cristóbal, el dirigente gallego Rafael Pillado y el vasco Tomás Tueros.

Los restantes carrillistas que a partir de ayer dejaron de ser miembros del Comité Central del Partido Comunista de España, son Norberto Buenache, uno de los principales colaboradores de Piñedo en el comité de Madrid; Los valencianos José Fons y José Galán; el veterano Anselmo Hoyos; el granadino José Soriano y Javier Terriente.-

Todos ellos parecieron ayer aceptar, lo mismo que el propio Carrillo, su exclusión del Comité Central. Sin embargo, no aceptarán, según dijeron, cualquier apartamiento de los organismos directivos en los comités regionales, ya que denunciaron como "ilegales y fraudulentas" las convocatorias de sendas conferencias extraordinarias en Madrid y el País Valenciano.