El partido de Carrillo
La VanguardiaHace aún poco tiempo no hubiera habido duda de que decir el partido de Carrillo no hubiera sido más que una manera de decir el partido comunista: tan identificada parecía la figura del líder con el grupo político que incluso llegó a ser mencionado también en las conversaciones simplemente como "el partido". Pero, lo que va de ayer a hoy, ahora el veterano dirigente escucha abucheos en las reuniones del partido comunista y el comité ejecutivo piensa si imponerle o no sanciones y asegura que si no lo hace no será por debilidad.Las chispas más recientes saltaron cuando el señor Carrillo protestó en el Congreso de que el presidente del Gobierno no hubiera consultado con él, y el señor González reveló que la secretaría general del partido había indicado que las consultas sobre política exterior había que hacerlas con el señor Iglesias y no con el señor Carrillo. Si la posición del antiguo líder es débil en el partido, no es fuerte tampoco en el Parlamento; sigue siendo portavoz, pero de sólo cuatro diputados. ( ... )
14 de diciembre
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