Trabajadores del astillero Euskalduna volvieron a protagonizar ayer violentos incidentes

El comité de empresa de Euskaldana -la factoría de Olaveaga de Astilleros Españoles-, un sector de cuya plantilla volvió a protagonizar ayer violentos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, acordó ayer mismo discutir en cada una de las secciones sindicales con presencia en la fábrica "los distintos puntos de vista que existen sobre las movilizaciones" y mantener la producción "on el fin de evitar el deterioro de la situación.

Asimismo se acordó concretar, como única acción prevista para el día de hoy, la realización de una concentración en la explanada de la factoría, a las 10.00 horas, con posterior salida a la calle, y convocar asamblea general el miércoles con el fin de "fijar los objetivos de las movilizaciones y calendario de las mismas".Ayer, desde primera hora de la mañana, contingentes de la Policía Nacional, con el auxilio de seis tanquetas blindadas, habían tomado posiciones en las dos entradas principales de la fábrica, situadas, respectivamente, en la plaza del Sagrado Corazón y en las inmediaciones del puente de Deusto. Ello impidió que los enfrentamientos que, de todas formas, se produjeron más tarde llegasen a afectar, como en los días anteriores, al tráfico rodado o tránsito de peatones por la zona.

Hacia las 7.15 horas, la policía rompió las cadenas que los trabajadores habían colocado en los accesos a las oficinas de la compañía, desde cuyas ventanas hostigaron otros días a la fuerza pública. A media mañana, un grupo de personas, desde el interior del astillero, en acciones relámpago, comenzó a arrojar piedras y otros objetos contundentes, con el auxilio de tiragomas, contra los policías. También fueron arrojados 18 cócteles molotov, uno de los cuales alcanzó a la tanqueta que taponaba el acceso a la factoría por la plaza del Sagrado Corazón. La policía utilizó ayer una manguera que lanzaba agua a gran presión, similar a la que emplean cada día los manifestantes.

Por otra parte, trabajadores de la empresa metalúrgica asturiana Talleres Moreda interceptaron ayer durante algo más de dos horas la vía de Renfe en Gijón. Una barricada levantada con neumáticos incendiados impidió la salida de los trenes con destino a Madrid y a León-Orense hasta las 14.30 horas, informa Miguel Somovilla. La acción que provocó un duro enfrentamiento con la policía, aunque no se registraron heridos.