Manuel Olivencia,
catedrático de la universidad de Sevilla, recientemente nombrado comisario de la Expo 92, ha tenido una compensación de fuste a los numerosos sinsabores que da la docencia. El presidente del Gobierno, Felipe González, a quien el catedrático dio clases de Derecho Mercantil, al igual que al presidente andaluz, José Rodríguez de la Borbolla, le ha pedido que no abandone la universidad, por lo que seguirá con sus clases, aunque tenga que dedicar mucho tiempo a su nueva función. Tocado en su coquetería profesional, Olivencia ha dicho que "esto, lógicamente, es una extraordinaria satisfacción, no por venir del presidente del Gobierno, sino por venir de un alumno".
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