Las infecciones hospitalarias representan uno de los capítulos más importantes de los gastos sanitarios

Las infecciones hospitalarias en España, que son contraídas por los enfermos principalmente por falta de asepsia o higiene en los establecimientos sanitarios, representan al año uno de los capítulos más gravosos del gasto sanitario, sin que por ello la Administración haya dado hasta el momento muestras de tener suficiente conciencia del problema. Según un estudio realizado por el médico Valentín Hernández Vaquero, jefe del servicio de medicina preventiva del hospital sanitario Nuestra Señora de la Candelaria, de la Seguridad Social, en Tenerife, en un solo centro hospitalario de la isla el coste por este concepto se elevó a 160 millones de pesetas. Para el conjunto del país se estima en más de 25.000 millones de pesetas.

El estudio de Valentín Hernández Vaquero, está basado en una investigación realizada en el Hospital General y Clínico de Teneife a lo largo de un año. Las conclusiones del mismo, extrapoladas a nivel nacional, descubren lo que puede ser uno de los focos más relevantes de gastos innecesarios en un hospital. En su trabajo se hace un seguimiento, caso por caso, de los pacientes que sufrieron infecciones hospitalarias, contabilizándose los días de exceso en las estancias por esa razón. Al cabo de 12 meses, los gastos en dicho hospital por tal concepto sumaban 160 millones de pesetas. En esta valoración se incluyen conceptos como asistencia, medicación, personal, alimentación, etcétera.La misma cuantificación para el conjunto de los hospitales de la Seguridad Social del país hace un montante que podría acercarse al doble de lo calculado en 1978, es decir, unos 16.000 millones de pesetas, cantidad bajada en el precio de la cama hospitalaria de entonces, cifrado en torno a las 8.000 pesetas (hoy se eleva a unas 15.000 pesetas).

En cada centro hospitalario existe un comité de infecciones, integrado por un bacteriólogo, un farmacólogo, un especialista de medicina preventiva y un representante de cada servicio. Este órgano, que se reúne mensualmente, no tiene capacidad ejecutiva y sus recomendaciones no suelen tener el eco deseado. Por otra parte, en opinión del autor del trabajo, no existe una correcta educación sanitaria del personal de los hospitales, no sólo a nivel de auxiliares y celadores, sino de los propios médicos. Entre las precauciones necesarias para combatir el desarrollo de las infecciones figuran, junto a un adecuado programa de antisépticos y antibióticos, normas básicas de higiene dirigidas al personal sanitario que incluyen desde las manos hasta la vestimenta. En este sentido, es fundamental que funcione a la perfección la central de esterilización y desinfección en los hospitales.

Unidad de vigilancia intensiva

Causa verdadero impacto saber que en la unidad de vigilancia intensiva del Hospital General y Clínico de Tenerife el número de enfermos que llega a sufrir infecciones representa casi el 40%. En otro servicio, el de pediatría, es el 25,2%; en medicina interna, cirugía y obstetricia y ginecología el porcentaje va desde un 7,6% hasta un 4,6%. El 12% de los enfermos del hospital sufren este tipo de infecciones, localizadas generalmente en el aparato urinario y en el respiratorio. Con todo, esta investigación, una de las primeras aportaciones al estudio del problema, ha podido abarcar únicamente las infecciones causadas por gérmenes y no aquellas originadas por virus.