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Nuevo sistema para el control de tráfico ferroviario en la estación de Chamartín

La estación ferroviaria de Chamartín, utilizada diariamente por 20.000 personas, ha sido dotada con una nueva y sofisticada instalación de ordenación del tráfico de trenes, que controla 179 kilómetros de vía por los que discurre el tráfico de los enlaces Norte de Madrid, de vital importancia para las comunicaciones de la ciudad. Las nuevas instalaciones, en las que se han invertido 750 millones de pesetas, incluyen un puesto de mando desde el que se controla el tráfico de convoyes, un sistema que garantiza la seguridad y equipos electrónicos que constituyen la inteligencia del complejo. Los trayectos controlados por el nuevo sistema de señalización comunican zonas claves de la provincia: el enlace Chamartín-Atocha, la línea Madrid-Burgos hasta Riaza (Segovia), la vía rodeo que une Coslada y Las Rozas, así como los ramales que llegan a Vicálvaro, Hortaleza, Fuencarral, Pitis y la Universidad Autónoma de Madrid. Por Chamartín circulan diariamente 337 trenes, y el total de movimientos unitarios se aproxima a los 1.200.

El puesto de mando que forma parte de las nuevas instalaciones de la estación de Chamartín posee un gran panel en el que se reciben todas las informaciones procedentes de las vías sobre el estado de las señales, situación de los trenes, posición de las agujas y otras. El sistema proporciona una visión detallada del estado del tráfico ferroviario y permite seguir el recorrido completo de un tren, lo que posibilita su localización inmediata en un momento determinado.

Evitar accidentes

También se han extremado los sistemas de seguridad para evitar al máximo posibles accidentes. El sistema actúa como un filtro, que sólamente obedece aquellas órdenes que no comprometen la seguridad del tráfico. Por ejemplo, nunca permite la apertura de una señal, aunque la orden proceda de un ordenador, si existe riesgo de colisión con otro tren, y en caso de detectarse una avería impedirá cualquier movimiento de los trenes antes que permitir que circulen de forma incontrolada. Por último, las instalaciones poseen un sistema electrónico que recoge la información procedente de las vías y la envía al puesto de mando. Los principales elementos de esta parte de la instalación están duplicados, para evitar que en el caso de que se produzca una avería se paralice la totalidad del complejo ferroviario que gobierna. El sistema consta de dos ordenadores, de los que solamente uno actúa habitualmente, mientras el otro permanece de reserva, aunque también procesa la información. El nuevo sistema de localización y control de tráfico de Chamartín es de construcción y tecnología españolas.

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