Damborenea ahoga por una política de dureza con el PNV

El secretario general del Partido Socialista de Euskadi-PSOE en Vizcaya, Ricardo García Damborenea, abogó ayer por una política de dureza y no permisividad frente al Partido Nacionalista Vasco: "El Gobierno ha comprobado que la lucha contra el terrorismo no es ineficaz, aunque no participe en ella el PNV". Damborenea, en la conferencia que pronunció en el club Siglo XXI de Madrid, se mostró escéptico respecto a las posibilidades de sentarse a negociar con ETA, afirmando que "no tenemos que someternos a un sistema similar al de Al Capone, pagando un precio para que se reconozcan nuestros más elementales derechos". García Damborenea aseguró que, pese a las apariencias, las cosas nunca han ido mejor para llegar a una solución del problema vasco. El secretario general del PSE en Vizcaya afirmó también que, pese a su voluntad actual de mantener sus posiciones radicales, "el PNV ya no se echa al monte"; entre otras razones, porque los nacionalistas vascos saben que, a partir de ahora, y con la próxima incorporación a la Comunidad Económica Europea, el camino de Europa pasa por Madrid.

Otros puntos positivos que abonan el optimismo de García Damborenea consisten en la llegada al poder de los socialistas, que han consolidado el sistema en el proceso de autonomías y han instaurado el realismo frente a la utopía, "lo que hace que el discurso nacionalista sobre el pueblo oprimido y agónico pueda llegar al ridículo".

El Gobierno debe, en la concepción de Damborenca, facilitar un proceso de moderación en el PNV, lo que equivale a no aceptar sus crecientes exigencias, que conducen a los nacionalistas vascos a un radicalismo cada vez mayor. "El Gobierno puede resolver las crisis internas al PNV".

Opinó el dirigente socialista que el nacionalismo vasco tiene un ciclo de nacimiento, crecimiento y muerte y que este ciclo "ha durado ya más de lo que correspondería a una ideología nacionalista". Cuando España ingrese en la CEE, "el PNV tiene que escoger entre ser un partido demócratacristiano o ser el Sagaseta de las naciones oprimidas, y yo creo que va a optar por ser democristiano".

"ETA ya no es una amenaza"

También se mostró optimista sobre las probabilidades de que el terrorismo llegue pronto a su fin: "ETA ya no representa una amenaza para el sistema y es un movimiento que no se reproduce ni aunque se le pague, porque faltan las circunstancias que en su día favorecieron su desarrollo". La lucha por la hegemonía del nacionalismo en el País Vasco está siendo ganada, aseguró, por el PNV y todo hace pensar que Herri Batasuna no seguirá siendo un problema dentro de 10 años, "porque no tiene el suficiente soporte para ello". Acerca del proceso estatutario, Ricardo García Damborenea piensa que tiene que ser el Gobierno y no las exigencias del lendakari, quien marque la velocidad máxima y quien garantice las interrelaciones. "En el actual clima de condiciones y exigencias, es dificil llegar a un entendimiento y todo hace pensar que, a corto plazo, la crispación va a continuar porque no hay acuerdo en los dineros".