Los dirigentes del PSC creen que sus tensiones con el Gobierno "no son para rasgarse las vestiduras"

Los dirigentes del PSC (Partit deis Socialistes de Catalunya-PSOE) situados en la órbita del secretario general, Raimon Obiols, rechazan que, pese a las dificultades que surgen entre el partido y el Gobierno socialista, haya una crisis entre ambas entidades, y comparan esta situación con las relaciones que mantiene el Ejecutivo con el PSOE "que no son óptimas y llevaderas, pese a que el presidente del Gobierno y el vicepresidente -Felipe González y Alfonso Guerra- son el secretario general y el vicesecretario general, respectivamente. O con la UGT "que tampoco son un camino de rosas". "Esto no es motivo para rasgarse las vestiduras", manifestó una fuente del PSC, "ya que hay apreciaciones e intereses desiguales".

La dirección del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) considera que las relaciones con el Gobierno socialista son positivas "aunque sin duda deben mejorarse", y están convencidos de que en los próximos meses se verá el esfuerzo de los socialistas catalanes por mejorar los mecanismos de diálogo con el Ejecutivo, ya que "de los errores también se aprende".Para los dirigentes del PSC, las relaciones con los ministros socialistas son globalmente buenas, cosa que no sucede con muchos cargos intermedios de la Administración central. Varios ministros del Gobierno reprochan al PSC su tímida defensa de la política del Gobierno en Cataluña (ver EL PAIS de ayer).

Existe un criterio compartido entre los dirigentes del aparato del partido de que muchos problemas que se plantean entre el PSC y el Gobierno son producto del "grado de soberanía e independencia" que tratan de aplicar a su política los socialistas catalanes. Éste sería el caso de las diferencias con el ministro de Adininistración Territorial.

La impresión generalizada de sectores importantes del partido que en función de su cargo en el Parlamento catalán o en la estructura del partido mantienen conversaciones con los minísterios es que cuando se habla con los ministros socialistas el grado de coincidencias es, salvo excepciones, elevado. No sucede así en las negociaciones con altos cargos de la Administración central -"de ministro para abajo"- donde los problemas son, en ocasiones, importantes.

Estos sectores desearían, según una fuente del PSC, "que actuáramos como sucursalistas". "El PSC es un partido soberano y nosotros nos comportamos como como compañeros, como socialistas y como gente solidaria, pero con nuestra propia personalidad, sin admitir dictados de nadie, y menos de tecnócratas de segunda fila", indicó un cualificado dirigente del PSC.

La postura de la dirección del PSC ante los conflictos que han trascendido a la opinión pública -petición de dimisión del director general del ente público de RTVE y críticas a determinadas posiciones del ministro de Administración Territorial- obedecen a una actitud de reconocer que existen problemas, "no magnificarlos pero no disimularlos, ya que se producen dentro de la más estricta y total normalidad".