18 martes
He vivido de cerca lo de la niña/ niño/Monstruo de Majadahonda porque ya soy un poco majariego. Es el caso de "la cándida Eréndira", de García Márquez, pero contado por Solana. Un truco de feria ha movido a Ruiz Giménez, en lo que este hombre tiene de quijotesco, comohubiera movido a Don Quijote. Hay una España inmóvil que Cervantes, fijó para siempre. Y esa España entre pánfila y atroz no está tantel en los niños deformados interiormente por sus padres como en el gusto del público por ver deformidades. Un inglés dijo que "ser sentimental, en literatura, es asegurarse el éxito". En España resulta. de más éxito ser atroz, tremendo, e incluso hubo una escuela literaría, en la postguerra, que se.llamó "tremendisino". Pasada la movida de Prensa y público, el niño/niña/monstruo de las ferias entrañables de Majadahonda se nos torna metáfora de toda una infancia estafada, profesional de la mendicidad, educanda de la lástima, párvula del llanto ' que pide por la Gran Vía , pide por mi barrio y anda, siempre por en medio, ellas con su carterita y su insinuación de siete años, ellos con su manera bronca y casi exigente de extender la mano en cuenco, sin molestarse siquiera en hablar (todavía no han aprendido, ni quieren, las centenarías letanías de la mendícidad). No admiten comida, no admiten gambas a la plancha (a mí me las han rechazado por Santa Engracia). Exigen dinero porque alguien se lo exige a ellos. (O ese hombre con viscosilla de jubilado, que pide entre los viajeros frustrados de Barajas, en huelga.) Docenas de niños lucer por Madrid la deformidad moral de sus padres y explotadores. Pero las autoridades sólo toman cartas si el niño monta barraca.20 jueves
Ha muerto Louis Renard, creador del bikini. Tenía ya muchos años -88- el hombre que les quitó tantos de encima a las mujeres. Renard. supo industrializar su poética creación, cosa que generalmente no saben hacer los poetas. Ahora que incluso tenemos en España un congreso internacional del nudismo, el bikini puede considerarse estéticamente, con el mismo altruismo deserotizado que si fuera el paletó. Mary Quant y Louis Renard crearon la mujer del medio Siglo. La Quant, con la minifalda, no pretendía que las mujeres enseñasen más, sino que enseñasen mejor. La minifalda alarga las piernas e infantiliza vagamente a, toda mujer. Pero en seguida surgió la adusta contestación española, en la voz de nuestra conciencia, que entonces era la de Manolo Escobar: "No me gusta que a los toros te porgas la minifarda". La genial distorsión sintáctica alivia aquí el machismo/moralismo. El bikini redime la dudosa suerte de los senos, esos mellizos sin fortuna, y, con su corte por la pelvis, en sancha las caderas, mejorando en consecuencia la cintura. No eran dos audacias fáciles y exhibicionistas, sino dos alteracio nes en los referentes eróticos de la mujer. No otra cosa le pedimos a la literatura: que nos cuente lo mismo de otra forma.
22 sábado
Hablo en Castilla la Vieja, Zamora, Junta de Castilla y León, sobre los escritores de/en Castilla. Historicismo del 98, esteticismo del 27. Castilla, princesa encantada y muerta, queda intocada- Sólo los socialrealistas de postguerra -Delibes- desnoventayochizan Castilla. Delibes realiza la laponización de Castilla, describiéndola a niveles minimos de supervivencia, o bajo mínimos. Hablo en Castilla la Nueva, Herencia, llevado por el gran expresionista lírico Agustín ]Ubeda. Ambas Castillas, hoy, no son sino el olvido-de los demás. Y ese desatino escrito recientemente: "la bota militar- de Castilla".
23 domingo
Hay unos economístas de la economía, Tamames y así,y unos economistas que, en realidad, son monetaristas de la moneda, profesionales del cambio y vuelta, la última generación del dólar/peseta, fenicios de poliuretano que ya no comercian con las cosas ni con los valores, sino con el signo del es que trabajen en un Banco, en una Banca, Es algo más sutil. Llevan lo bancario consigo, en la cabeza, y la música de las cotizaciones, como Baudelaire llevaba la música de Hugo. Son jóvenes por años, pero, sobre todo, por inasequibles a los desengaños. Se mueven en la ciudad y la naturaleza no les dice nada, como al poeta. Hermosos y segundones del neocapitalismo, saben que el oro no se guarda en paño, sincir que al oro lo guarda el oro: que el oro es sólo un concepto que genera signos, y ellos viven entre signos -el signo del -dólar, el signo del marco-como el investigador entre bacterias. Proceden de las clases medias, pero alternan y descorchan mucho en Serrano, porque aspiran, para el matrimonio, a las manos blancas de la clase alta, que no ofenden. Son especie más que individuo, con una psicología de terlenka que mola pepsicola. Su inglés comercial básico es una dialéctica que manejan como Shakespeare su inmenso inglés barroco. Tienen una personalidad colectiva y comulgan el nuismo aperitivo. No leen, pero viven transidos de hijo- musical. Confunden la democracia con la libertad de mercado, y el porvenir con la rentabilidad. Si el pasado fue de los ideólogos y el presente es de los economístas, nuestro futuro va a ser, simplemente, de los monetaristas. El futuro nacional/ occidental, digo. Llevan los colores Esos y el alma a rayas. Son apolípticos como ángeles y aplícados como seminaristas. Viven aupair y trabajan en zigzag, a poder ser con japoneses. Son los Cara de Plata del neoliberalcapitalismo. Y muy monos.
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