Dos policías

El pasado día 11 de julio viajábamos en el tren Talgo (coche 62, compartimiento 4) con destino a París, a pasar una semana de vacaciones, cuatro amigos, tres chicos y una chica, hermana de uno de ellos y novia de otro. A poco de salir de Chamartín se personaron en el compartimiento dos señores, que identificamos como policías por la chapa que uno de ellos portaba en el bolsillo de la camisa. Nos pidieron el pasaporte y a continuación el DNI. Se retiraron, y al cabo de unos momentos volvieron diciendo que les parecía muy extraño que viajáran-ros tres chicos y una chica, y que así no se podía viajar, cosa que nos pareció absurda, pues no hay ninguna ley que lo prohíba, que sepamos. Manifestaron su interés en registrar los equipajes, hecho al que no nos negamos. Una vez iniciado esto, llega,ron a pedir hasta el bono del hotel que teníamos reservado, cosa que entendemos que de interesar a alguien sería a la policía francesa. Insinuaron que si no hubiéramos llevado hotel habríamos dormido en un barco, lo que nos hace pensar que de haber ido a una casa particular nos habría creado problemas. Después de esto continuaron con una especie de interrogatorio de comisaría en un tono un tanto socarrón y burlesco, sobre todo al darse cuenta de que lograron poner nervioso a uno de nosotros, lo que para ellos debió ser el éxito conseguido, pues al poco nos devolvieron la documentación, deseándonos en un tono un tanto irónico "que lo pasáramos bien".-