La selección española de waterpolo, con posibilidades de llegar a disputar uno de los tres primeros puestos
La selección española de waterpolo debuta hoy al mediodía contra Brasil en la pileta de la Universidad de Pepperdine, en la famosa zona costera de Malibú. El cuarto puesto de los Juegos de Moscú vuelve a estar al alcance de los nadadores españoles. Las ausencias de Hungría y sobre todo de la Unión Soviética han igualado la participación, y las posibilidades de alcanzar la fase Final parecen bastante claras. Sólo un obstáculo: la, selección griega, entrenada ahora por el ex seleccionador nacional Josep Brasco, que, además, es un gran amigo del actual seleccionador, Manuel Ibern.Para Ibern, Brasil no puede plantear problemas; con el país anfitrión, Estados Unidos, ya se verá, pero del triunfo ante Grecia depende la clasificación. La baja del portero titular, Manolo Delgado, cuya lesión ocular le ha obligado a abandonar el waterpolo, va a ser cubierta por los jóvenes Leandro Rivera y Marlano Moya.
Manuel Estiarte, la estrella del equipo español, está en perfectas condiciones, y sólo Toni Aguilar tiene una pequeña lesión en la muñeca que no acaba de arreglarse.
Cuando se le pregunta por las posibilidades de una medalla, prefiere mostrarse cauto: "Es posible", admite Ibern, "pero no me atrevería a asegurarlo. Con la excepción de la Unión Soviética, que nos saca a todos una ligera ventaja, entre los siguientes siete u ocho equipos hay una gran igualdad. Cada partido es una incógnita y depende, a veces, de un error táctico, de un día con moral baja, de un fallo. Creo, sin embargo, que debemos estar entre los seis finalistas; pero son siete partidos a jugar en 10 días, y la suerte tiene un gran papel".
Manuel Estiarte es la gran estrella de la selección española, un hombre que suele reconocer sale a cuatro o cinco goles por encuentro. Después de Los Angeles parece que se marchará a jugar a Italia, donde puede hacerse con más dinero. Estiarte declaró que el juego de España está considerado como el más bonito de los grandes del waterpolo mundial, pero que, por su carácter, peca de irregular. "Somos irregulares porque nuestro juego depende de nuestra inspiración y no la poseemos siempre".
En cualquier caso, España lleva varios años entre la élite mundial, con un relevo adecuado para la selección senior por el mero hecho de que se han obtenido los campeonatos de Europa y del mundo júniores. La selección actual es parte de un relevo de altura.
