La banca no puede hacer pactos que van contra las leyes del mercado, según Rafael Termes

El presidente de la Asociación Empresarial de Banca (AEB) Rafael Termes, declaró ayer que le parecía muy bien que algunos bancos hubieran decidido bajar por su cuenta los tipos de interés preferenciales, pero que la banca no podía ni debía intentar llegar a acuerdos sobre estos temas. "No podemos hacer pactos obligatorios sobre reducción de tipos de interés, pues irían contra las reglas del mercado", afirmó el presidente de la patronal bancaria en la conferencia de prensa que siguió a la clausura del seminario celebrado en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo sobre Latinoamérica y la crisis financiera internacional.

Alfonso Escámez, presidente del Banco Central, manifestó que algunos bancos podían iniciar de manera aislada la reducción de tipos de interés debido a que habían absorbido recientemente bancos en crisis que gozaban de la ventaja de exención de coeficientes obligatorios, lo que sin duda les favorecía para iniciar ese camino. Escámez recordó que la responsabilidad en la reducción de los tipos de interés del crédito no correspondía exclusivamente a la banca y cajas de ahorro, sino también, y muy especialmente, al Gobierno, que mantiene cautivo el 52% de los recursos del sistema bancario y que ofrece continuamente por televisión emisiones de pagarés a altos tipos de interés."No serviría de nada que los bancos y cajas tratáramos de bajar los tipos de interés", añadió Escámez, "si el Gobierno no sigue por el mismo camino". El presidente del Central reivindicó que su banco recibía, a través de sus productos por tipo de interés, un punto menos que la media de la banca española, por lo que presumía de dar los créditos más baratos.

Escasa confianza

Rafael Termes se mostró muy poco esperanzado !obre el efecto producido por una eventual reducción de tipos de interés en la que tan interesado se muestra ahora el Gobierno. "No soy optimista", dijo, "en lo que se refiere al efecto de la baja de tipos de interés sobre la demanda empresarial de créditos que contribuya a una reactivación de la economía española, ya que ésta depende también de otros muchos factores"Los tipos de interés del dinero a nivel internacional centraron también el debate que siguió a la clausura del seminario sobre la deuda externa latinoamericana. Si tenemos en cuenta, como han puesto de manifiesto los conferenciantes latinoamericanos, que los rendimientos de sus países, en términos de ingresos por exportaciones, van disminuyendo, mientras los intereses de su deuda externa van creciendo a mayor ritmo, corremos el riesgo de convertir pronto lo que hoy es un grave problema de liquidez en un problema de solvencia que lleve al colapso del sistema financiero internacional.

Sin embargo, ni Alfonso Escámez ni los representantes de los mayores bancos europeos presentes en el seminario vieron con tanta gravedad el futuro, sino que entendieron que las fórmulas ensayadas hasta ahora, desde que estalló la crisis mexicana en el verano de 1982 -basadas en la renegociación temporal o parcial de la deuda y en programas de ajuste acordados con el Fondo Monetario Internacional-, suponían una valiosa experiencia inicial para seguir buscando nuevas soluciones.

El presidente del Banco Central, al resumir las posiciones de los representantes latinoamericanos, dijo: "Yo no veo tanto dramatismo ni pesimismo como se ha manifestado aquí en Santander, sobre el tema de los tipos de interés internacionales, y no comparto esa postura porque creo que el propio Estados Unidos será el primer interesado en salvar la estabilidad del sistema bancario interno, y para ello tendrán que corregir la actual marcha ascendente de los tipos de interés".