El Rey almorzará hoy con el presidente Sandro Pertini en una 'trattoria'

Existía ayer mucha curiosidad en Roma por saber dónde verían la final España-Francia el rey Juan Carlos y la reina Sofia, que acudieron a la capital italiana para asistir a la conferencia inagural de la Conferencia Mundial de Pesca de la FAO (Organización para la Alimentación y la Agricultura, dependiente de las Naciones Unidas).

Se había corrido la voz de que los Reyes iban a ver el partido con el anciano presidente de la República, Sandro Pertini, que, como es conocido, tiene una debilidad paternal cgn el joven rey español. Pero la misma presidencia de la República Italiana confirmó a EL PAÍS que la noticia no era cierta: "Es justo que el Rey vea el partido en la Embajada de España, con sus amigos españoles", comentó el jefe del Gabinete y ministro plenipotenciario, Michelangelo Jacobucci. Lo que sí se ha confirmado es que Pertini invitará este mediodía al Rey a comer en una trattoria romana. "Van a comer los dos solos, mano a mano, como dos solterones", dijo bromeando Jacobucci.

El anciano Pertini sigue siempre con gran interés todo lo que se refiere a España, y ya le ha pasado una vez con algún ministro que, al saber que se iba a comer a un restaurante, le dijo: "Yo no puedo permítirlo. ¿Qué diría el Rey? Usted come en mí casa". Esta vez, cuando supo que don Juan Carlos visitaría Roma, había llegado a los oídos de Pertini que por motivos de seguridad quizá la familia real se iba a alojar en un hotel de la capital. Sin esperar más y sin advertir a su jefe de prensa, cogió el teléfono y llamó a la Embajada española para decirle al primero que levantara el teléfono que eso de hotel, nada. Que si el Rey y su familia no se quedaban en la Embajada española, "pues entonces se vienen todos al Quirinale". Sólo cuando se le aseguró que los Reyes iban a ser huéspedes del embajador, Jorge de Esteban, el buen Pertini se quedó tranquilo.

Los Reyes serán recibidos hoy por el papa Juan Pablo II, y después de la comida con Pertini volverán a Madrid.