La baja de Rincón obliga a Muñoz a modificar el esquema ofensivo de la selección

Emilio Butragueño, líder de la famosa Quinta del Buitre que parece llamada a ser la base del nuevo Real Madrid de Amancio Amaro, sustituirá hoy al hético Hipólito Rincón -lesionado en el encuentro que la selección española jugó, el pasado jueves, en Budapest- en la lista de seleccionados que la Federación Española de Fútbol entregará a la Unión Europea de Fútbol Asociación (UEFA) y que formarán el cuadro que debutará, el próximo día 14 de junio, en la Eurocopa de naciones frente a Rumanía. La lesión de Rincón obligará a Muñoz a variar el esquema ofensivo de la selección.

Miguel Muñoz, seleccionador nacional, no tuvo problemas a la hora de escoger al sustituto de Rincón, una vez se supo, el pasado jueves, poco antes de media noche, que el goleador bético sufría una osteopatía de pubis que, casi con toda seguridad, le obligará a pasar por el quirófano. Esa noche, lo que sí se confirmó es que Rincón deberá guardar 10 días de reposo absoluto antes de reanudar los entrenamientos, lo que le dejaría con pocas posibilidades de entrar en el cuadro titular del día 14. Como la lesión podía complicarse, el propio Rincón, después de ser revisado por el doctor Delgado y en presencia de Muñoz, Vicente Miera y los masajistas Ángel Mur y José Luis Rubio, le dijo al seleccionador: "Lo mejor es que llame usted a otro compañero, porque yo no quiero perjudicar a la selección".

Se cambia el esquema

Muñoz comentó que había estado buscando un hombre de similares características a las de Rincón "pero no lo he encontrado" y explicó que la llamada a Butragueño "se debe a que forma parte de ese equipo sub-21 que ha conseguido ser subcampeón de Europa y que, en principio, debe nutrir, a partir de ahora, a la selección grande". Rincón será examinado por el doctor Pedro Guillén, del centro Mapfre de Madrid, que ya le trató de una lesión similar hace, aproximadamente, dos meses y, a partir de ese diagnóstico, se sabrá si es necesaria la operación, a la que Rincón está dispuesto a someterse "porque llevo arrastrando esta lesión u otra similar durante toda la 1 emporada".

La lesión de Rincón se produjo en un forcejeo con un defensa húngaro. "Me bloqueó la pierna derecha, intenté salirme como pude, estiré y me rompí". El jugador bélico también tiene afectado el abductor mediano de la pierna derecha. La ausencia de Rincón, dará entrada, con toda seguridad, a Carrasco en la titularidad. Lobito ya ha reemplazado a Rincón en los dos últimos encuentros. Tanto Miguel Muñoz como los jugadores consultados por este periódico confirmaron que "el sistema que estamos practicando deberá sufrir serios retoques tras la baja de Rincón, ya que el bético era nuestro jugador rompedor, el hombre que se peleaba con la defensa".

Según ha podido saber EL PAIS, la variación más importante que efectuará Muñoz -"sólo nos queda un partido de ensayo, frente a Yugoslavia, el próximo día 7"- será la adjudicación del papel de rompedor a Santillana, mientras Carrasco realiza las funciones de media punta que efectuaba el jugador blanco cuando el rival iniciaba su ataque. Santillana, que ha reafi:zado en el Real Madrid esta función durante esta temporada en diversas ocasiones, aceptará con disciplina su nuevo destino, más por el bien del conjunto que por otra cosa.

Rincón entró llorando, el pasado jueves, en los vestuarios del estadio del Ferencvaros. Sabía que se le había acabado su "sueño dorado, ser titular de la selección en una gran competición como es la Eurocopa 84".

Todo empezó en el verano de 1981, cuando Luis Aragonés era entrenador del Betis -equipo que abandonaría poco antes de iniciarse la Liga por problemas de salud- y recuperó a Rincón, que era entonces suplente en el Real Madrid. Rincón, que logró el Pichichi la pasada temporada, iba a ser observado por tres clubes italianos en la Eurocopa y Martínez Retamero, presidente del Betis, soñaba con sacar más de 100 millones co su traspaso, con lo que sanearía la economía del club verdiblanco y mantendría a Rafael Gordillo en su equipo. Luis intenta ahora recuperar a Rincón para el Atlético.

"Esto era toda mi vida", dijo el jugador al entrar en el vestuario. "En estos momentos, voy como sonámbulo. El palo lo notaré el lunes, cuando me dé cuenta de que no vuelvo a la concentración de la selección". La intervención de José Luis Rubio, masajista del Spórting de Gijón, fue, en ese momento, definitiva. "Poli, debes estar tranquilo. En septiembre empieza la fase clasificatoria del Mundial 86. Tienes que intentar, de nuevo, ganarte un sitio en la selección. Te contaré. En 1948, yo formaba parte del equipo olímpico español. Iba a participar en la prueba de 400 metros vallas y, el día antes de salir, cuando ya había colgado el uniforme en el perchero para ponérmelo al día siguiente, me lesioné. Al año siguiente batí el récord de Esparla en Montjuïc".