Villacampa, hundido moralmente por su sustitución en la selección
La decisión de Antonio Díaz Miguel de prescindir de Jordi Villacampa para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles después de su floja intervención en el preolímpico de Francia ha hundido al jugador de manera total. Villacampa, que decidió refugiarse en una casa que tiene en Arenys de Mar, volvió ayer a su domicilio de Badalona ante las continuas llamadas que ha recibido, para compartir el día con sus amigos y su novia.En una conversación telefónica con este diario dijo: "Estoy muy mal. Hubiera preferido que se seleccionara a Beirán desde un principio. Se tiene que entender que no soy ni tan bueno como se ha dicho ni tan malo como se me quiere poner ahora. Díaz Miguel me comentó en París que ya nos veríamos en Barcelona y cuando Lluís me llamó para ir a comer con Díaz Miguel pensé que me iba a dar ánimos, o que me daría un toque de atención para recobrar nuevas ilusiones. Díaz Miguel me comentó que necesitaba un tirador con garantías para cubrir una posible lesión de Epi o Margall, que mi futuro era importante, pero que ahora no confia en mí. Beirán lo tendrá tan difícil como yo porque jugar bien sin estar en la cancha ni cinco minutos por partido es muy complicado, más el primer año".
Villacampa, destrozado moralmente, afirmó que: "Es un palo muy fuerte que después de la primera convocatoria dejen de confiar en tí". No sé con qué confianza puedo volver a la selección si se produce una nueva llamada". Villacampa emprenderá un viaje en los próximos días para descansar y recuperarse anímicamente.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.