Los socialistas catalanes reivindican una política propia frente al Gobierno y al PSOE

El Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE) ha iniciado un proceso tendente a definir una política y una personalidad propias, distanciadas cuando sea preciso del partido federal y del Gobierno socialista, como consecuencia de la reflexión poselectoral que están realizando los socialistas catalanes. En este contexto debe interpretarse la adhesión de las organizaciones locales de Gerona y Barcelona a las manifestaciones anti-OTAN del pasado fin de semana y a la reivindicación, absolutamente mayoritaria, de que sus 25 diputados en el Congreso puedan volver a formar grupo parlamentario propio, como en las dos legislaturas anteriores.

El debate en las 120 agrupaciones locales y 24 federaciones territoriales del partido culminará en el Consell Nacional, máximo órgano entre congresos, que se celebrará el próximo 3 de junio. La ejecutiva nacional ha renunciado a encarrilar esta reflexión y ha preferido dar pie a la espontaneidad. Dirigentes del PSC consultados ayer por este diario se mostraron satisfechos de los resultados y afirmaron compartir el núcleo central de las conclusiones a las que se está llegando.El tronco común de esta reflexión es que el PSC debe recuperar su personalidad, diferenciada del PSOE, y una política propia -sobre todo, aunque no únicamente, en lo que se refiere a la que debe realizarse en Cataluña- Los asistentes al consejo de la federación de Barcelona -la más importante y representativa del PSC- celebrado el pasado sábado constataron que la "credibilidad nacional del partido está por los suelos a nivel de calle" y que se ha sido "débil y tímido" respecto al Gobierno socialista en cuestiones que afectan a la política catalana.

Los cuadros del partido consideran necesario que se critique la política gubernamental con la que no se está de acuerdo, como debió haberse hecho con la LOAPA o con los recursos presentados contra leyes del Parlamento catalán votadas por los diputados del PSC. "Los socialistas andaluces o valencianos, que gobiernan en sus respectivas comunidades, mantienen un nivel de confrontación con el Gobierno infinitamente superior al que nosotros hemos manifestado en momentos difíciles", se lamentó ayer un dirigente de esta federación. La reivindicación de un grupo parlamentario propio estuvo presente en todas las intervenciones.

En otras federaciones, como en la de Gerona y en la de Lérida, se ha ido más lejos. En Gerona se acordó proponer la supresión del nombre del partido el añadido (PSC-PSOE), que se impartan instrucciones a los diputados en el Congreso para que funcionen de hecho como grupo parlamentario dentro del Grupo Socialista mientras no se reforme el Reglamento de la Cámara, y que se ejerza la máxima presión política para que el Gobierno desista del recurso de inconstitucionalidad presentado contra dos artículos de la ley del catalán.

La federación de Lérida suspendió su reunión sin llegar a acuerdos concretos, pero se espera que cuando se reanude votará puntos semejantes. En Lérida se reclama además que dimitan de sus escaños los alcaldes de Gerona y de Lérida que fueron elegidos diputados presentándose en circunscripciones distintas a sus provincias.

Acciones anti-OTAN

La decisión de la federación de Barcelona de adherirse a la manifestación pacifista del domingo pasado en Barcelona -que tenía connotaciones de confrontación con la política exterior y de defensa del Gobierno- fue adoptada como ejemplo de esa independencia que desea reivindicar el PSC, admitieron ayer dirigentes del partido, aunque precisaron que no es la primera vez que los socialistas barceloneses se adhieren en los últimos meses a acciones contra la OTAN.La decisión fue tomada con el conocimiento previo de la ejecutiva nacional del PSC, que dio luz verde a la iniciativa. La ejecutiva local se reunió ayer tarde con el alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, para comunicarle el acuerdo de aquel organismo con el contenido de la carta abierta al alcalde, firmada por varias personalidades catalanas, para que el ayuntamiento se adhiera a la campaña por el desarme y para que en el próximo pleno se acuerde dirigirse al presidente del Gobierno solicitando la firma y ratificación del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.