Dos fugitivos mantienen en alerta a las fuerzas de seguridad tras secuestrar sucesivamente a dos policías y dos agricultores

Aniceto Rius y Juan José Sánchez, dos presuntos delincuentes comunes, ambos de 19 años, mantuvieron ayer en alerta a las fuerzas de seguridad de tres provincias del norte de España (Palencia, Burgos y Santander). En la noche del martes, los dos jóvenes secuestraron a dos policías nacionales que intentaban detenerles en Palencia. Tras dejar en libertad a los agentes, cometieron la misma retención ilegal, sucesivamente -y ya en la provincia de Burgos-, con otras dos personas, a quienes también dejaron libres después. En la noche de ayer, al cierre de esta edición, los dos delincuentes continuaban su huida, ya en solitario, por la provincia de Santander, donde llegaron a ser vistos por fuerzas de la Guardia Civil que participaban en las tareas de persecución.

Los hechos se iniciaron a partir de las 20.45 horas del martes, cuando dos policías nacionales de servicio en la estación de ferrocarril de Palencia pidieron la documentación a dos jóvenes que les infundían sospechas. Tras observar los datos en los carnés, los agentes los comunicaron al centro de documentación de la comisaría de policía. Desde allí, se dio orden de detenerlos, ya que uno de ellos estaba reclamado por diversos delitos menores. En este instante, los evadidos esgrimieron una pistola del calibre 9 largo y obligaron a los dos policías nacionales a introducirse en un Seat 1430, matriculado en Madrid.

Retención de dos campesinos

Cuando el vehículo pasó, a gran velocidad, por las inmediaciones del Gobierno Civil, el policía que estaba de guardia en la puerta creyó ver en el interior del coche a dos compañeros, y dio la voz de alerta. Desde el Gobierno Civil, a partir de ese momento, se puso en práctica el plan de seguridad previsto para estos casos.Los secuestradores, al verse perseguidos, abandonaron a los agentes en el término municipal de Villaumbrales, en la provincia de Palencia.

Tras seguir por caminos vecinales, retuvieron a un joven agricultor, Julio Alberto Escobar, que se dirigía, conduciendo un tractor, hacia su localidad, Villanueva del Rebollar. Escobar fue obligado a introducirse en el coche de sus secuestradores y a indicarles el camino a seguir, siempre yendo por zonas de concentración parcelaria.

Sobre las 20 horas, llegaron a Calzada de los Molinos, donde, a punta de pistola, entraron en una vivienda amenazando a una familia de campesinos para que les dieran las llaves del turismo que tenían aparcado en la puerta de la casa, un Seat 850. Encañonando a uno de los hombres presentes en la estancia, Joaquín Calzada, le obligaron también a acompañarles en su huida.

Los dos rehenes -el tractorista y Calzada- fueron liberados por sus secuestradores en la provincia de Burgos, en Villadiego, donde, ya en la madrugada del miércoles, los jóvenes delincuentes devolvieron el turismo a su propietario para que pudiese regresar a su hogar, en compañía del otro agricultor retenido.

Julio Alberto y Joaquín, los dos agricultores que se han visto envueltos en esta rocambolesca historia, aseguran que sus secuestradores estaban muy nerviosos y que, en todo momento, les aseguraron que lo único que pretendían era salir de la provincia de Palencia, con el fin de romper el cerco policial montado para detenerles. En ningún momento indicaron a sus rehenes el motivo de su espectacular huida.

Búsqueda en Santander

Una vez liberados los dos rehenes, los fugitivos siguieron en solitario su escapada, utilizando un vehículo robado, un Talbot Horizon que forzaron en Villadiego y que posteriormente abandonaron en la provincia de Santander, muy cerca de Solares, cuando fueron detectados por los controles policiales montados desde la tarde anterior.A las cinco de la madrugada de ayer, la Guardia Civil vió circulando en las carreteras de Cantabria el coche Talbot matrícula de Burgos robado horas antes en la localidad de Villadiego, lo que puso en marcha un amplio despliegue policial. El vehículo fue localizado poco después, pero no se evitó la fuga de los dos delincuentes.

A las 11.00 horas, el coche utilizado por los presuntos delincuentes fue encontrado en un camino que conduce a un monte ubicado en las proximidades de la localidad cántabra de Allendelagua, zona en la que la Guardia Civil supone que se encuentran los huidos.

A últimas horas de la tarde de ayer -informa - numerosos efectivos de la Guardia Civil, con el apoyo de un helicóptero, continuaban la búsqueda en los montes cercanos a la localidad cántabra de Allendelagua, entre los municipios de Laredo y Castro Urdiales.

Pese a la intensa búsqueda, tanto en el monte como en los caseríos cercanos, la comandancia de la Guardia Civil de Santander informó, a última hora de la tarde de ayer, que se continuaba sin encontrar el rastro de los fugitivos, quienes, según todos los indicios, habrán proseguido su huida a pie, ya que ninguna denuncia por desaparición de vehículos ha sido cursada en las últimas horas en Cantabria.